Estos Bulls amenazan a los de Michael Jordan

Estos Bulls van en serio, ya sea con o sin Rose, la franquicia de Chicago se ha lanzado a demostrar que son los candidatos más fiables para dominar el Este, sobre todo, viendo los altibajos que están sufriendo los Cleveland Cavaliers de LeBron James, Irving y Kevin Love.

En Cleveland la presión es extenuante, cada falló se paga, mientras que en Chicago la vida puede ser maravillosa, como diría el genial Andrés Montes. Los Bulls ya han ganado cinco de los seis partidos que han disputado esta temporada (cayeron ante los Cavs un encuentro que tenían ganando) y lo más relevante es que con la victoria de esta madrugada ante los Sixers en Philadelphia (115-118) han logrado cuatro de esas cinco en la carretera, lejos del United Center.

Puede parecer un dato más, una estadística marginal, pero no lo es. Los Bulls no iniciaban de forma tan contundente una campaña fuera de casa desde la época de Michael Jordan, más concretamente desde la 96-97, la del quinto anillo de la franquicia. En ese caso, el equipo entrenado por Phil Jackson logró seis seguidas como visitante. Gasol y compañía podrían igualar ese récord si consiguen ganar a los Raptors (complicado) y a los Clippers (aún más complicado). Y para superarlo deberán enfrentarse a los Kings, en Sacramento, algo que parecía fácil a principio de temporada, antes de que se liberase la furia de Cousins.

El partido de esta madrugada en el Wells Fargo Center tuvo dos noticias buenas (vuelta de Noah y el juego de Dunleavy) y una mala (ausencia de Rose, que se resintió del tobillo en el duelo ante los Bucks). Noah no había disputado los dos últimos encuentros por gripe y estuvo sobre la pista 30 minutos (lo que afectó a Mirotic que sólo jugó ocho), aunque algo lejos de su mejor forma. La llegada de Gasol y su cambio de posición, algo más alejado del aro, le están pasando factura. Mientras, Dunleavy se salió. Fue el máximo anotador del encuentro (27 puntos con cinco triples de ocho intentos) y junto a Butler (23) y Gasol (17 y 12 rebotes) lograron sacar un encuentro que se complicaron excesivamente tras alcanzar rentas cercanas a los 18 puntos de ventaja en la segunda parte después de irse al descanso con empate a 57-57.

Por su parte, los Sixers aún no conocen el triunfo (0-6) y establecen su peor inicio de temporada desde la 72-73, cuando establecieron una marca a final de temporada de 9-73.