VALLADOLID 91-TENERIFE 103
El Valladolid encaja más de cien puntos por séptima vez
Los de Ricard Casas se desinflaron tras el descanso y llegaron al final sin opciones. Sikma, con 39 puntos de valoración, fue el MVP de la jornada.
El CB Valladolid ha sumado otra derrota ante un Tenerife más organizado, que hizo valer el control en el juego interior, con un Sikma intratable —39 de valoración— y una mejor defensa para imponerse, a partir de la segunda mitad, a un conjunto local que perdió la concentración defensiva. Los vallisoletanos salieron con más intensidad a la cancha, mejor organizados en el plano ofensivo y con las ideas más claras, lo que les permitió tomar la iniciativa en el marcador ante un Iberostar que consintió demasiado en su área, ofreciendo a los locales lanzamientos cómodos.
Con el 18-1,1 el técnico del conjunto tinerfeño, Alejandro Martínez, pidió un tiempo muerto para frenar ese empuje del CB Valladolid que tuvo un efecto inmediato, ya que aumentaron la presión defensiva y comenzaron a hacer efectivo su lanzamiento exterior de la mano de Richotti y Rost. Así, los insulares fueron recortando distancias hasta volver a equilibrar el marcador al término del primer cuarto (28-28), lo que el cuadro morado deshizo con una buena salida, en la que recuperaron la concentración, con Andjusic como referente ofensivo, que dejó el resultado en 40-32 en el minuto 14.
De nuevo, el receso solicitado por el entrenador visitante dio sus frutos, y el Iberostar Tenerife se aplicó en defensa, controló el rebote y el juego interior con un destacado Sikma, y aprovechó sus lanzamientos para dar la vuelta al partido (42-43) y llegar con ventaja al descanso (46-48). Una ventaja que los vallisoletanos no conseguían deshacer, ya que Sikma seguía dominando la pintura y dando a su equipo una seguridad defensiva que les permitía mantener a raya al rival, que hoy no encontró ni en Pepe Pozas ni en Armon Johnson a un buen director de orquesta y perdió el guión del papel que debía interpretar.
Sin ideas en la faceta ofensiva y sin tensión defensiva, los vallisoletanos quedaron a merced de un Tenerife organizado que utilizó la fuerza del bloque y ese dominio en la zona para seguir aumentando las diferencias hasta el 57-72 con el que finalizó el tercer cuarto. Aunque el CB Valladolid lo intentó y no quiso rendirse, el cuadro insular ya se había propuesto ganar y, merced a ese poderío interior y a las eliminaciones de los locales, que terminaron por desquiciarles y dejarles sin capacidad de reacción, mantuvieron las diferencias para sumar una nueva victoria a su casillero (91-103).