PACERS 88 - HAWKS 107
Los Hawks se aprovechan de unos patéticos Pacers
Ridículo de Indiana ante su público con el 23-55 al descanso (la peor marca en anotación de historia de la franquicia en una primera mitad). Hibbert, sin jugar la segunda parte.
La crisis de Indiana parece no haber tocado fondo. Resulta complicado encontrar calificativos que describan a lo vivido por los de Vogel esta pasada madrugada ante su público. Los Hawks, conocedores de la derrota de los Knicks (con quienes batallan por el octavo puesto del Este pese a que no llegarán ni a las 40 victorias) en Miami, se extramotivaron para ridiculizar a sus rivales (88-107). Lo que hasta hace no mucho eran elogios por parte de todos los estamentos y prensa que siguen la actualidad de la Liga han dado paso a una serie de críticas que no encuentran razones aparentes para describir el naufragio que están viviendo los Pacers. Siete victorias y doce derrotas en los últimos encuentros dificultan el considerar a Indiana todavía como potencial candidato al anillo.
Lo positivo para los Pacers es que, por complicado que parezca, su brillante primera parte de la temporada aún les mantiene con opciones de conseguir el primer puesto del Este, ya que se encuentran a un solo partido de los Heat. No obstante, la prioridad en Indiana debería ser reconducir cuanto antes la situación, volviendo para ello a practicar la mejor defensa de la Liga y aunando esfuerzos entre sus jugadores. Frank Vogel y Larry Bird tienen trabajo (y margen de tiempo) por delante.
Ante los Hawks, Indiana se marcho al descanso con un paupérrimo 20% de acierto en tiros de campo, así como con 23 puntos en el zurrón, lo que supone un récord histórico de la franquicia: el de menos puntos anotados en la primera mitad. En dicho periodo, Atlanta maniató a los locales, quienes encajaron un doloroso 11-33 en el primer cuarto. El que les triplicaran en el marcador no fue motivo suficiente para reaccionar y volvieron a caer en el segundo (12-22). Su técnico llegó a cambiar a la vez a todos los integrantes del quinteto.
El propio Vogel, viendo al "desgastado" Roy Hibbert, optó por dejarle en el banquillo durante toda la segunda parte. En los nueve minutos que jugó, erró sus cinco lanzamientos y no capturó ni un solo rebote. "Consideré darle descanso, porque es un 2,18 que ha jugado cada partido del año, lo que es algo excepcional. Se está esforzando, pero le veo desgastado", explicó. "No tengo nada que decir", comentó el center tras el encuentro. La caída de los Pacers, la cual rozó el ridículo durante muchos minutos (apenas Paul George mostró algo de orgullo), eclipsó el paso adelante dado por Atlanta, quien deja a los Knicks a dos partidos.