BILBAO BASKET
El Bilbao jugará ante el Madrid pero hará huelga desde el lunes
Álex Mumbrú anunció que se "dejarán la piel" ante el líder, pero que los jugadores se pondrán en huelga: “Nos sentimos manipulados y decimos basta”.
La plantilla del Bilbao Basket ha dicho basta. Tras el anuncio del Igualatorio Médico Quirúrgico (IMQ), el viernes a última hora de la tarde, de que no será el patrocinador nominal del club, éste se encuentra herido de muerte, ya que no se atisba una salida a los reiterados impagos. Harta de promesas incumplidas, la plantilla se ha reunido esta mañana y a continuación ha comparecido ante los medios para leer un comunicado. Va a la huelga. Jugará este domingo ante el Madrid (12:40, La 1) y el lunes empezará su movilización.
Estaban todos los jugadores, incluso los vinculados, y el cuerpo técnico al completo. El capitán, Mumbrú, leyó un comunicado y luego se admitieron preguntas, que fueron contestadas por los pesos pesados del vestuario. “Ante las últimas noticias sobre la situación y a pesar de las falsas promesas desde el pasado verano, hemos llegado a un límite bastante difícil de soportar. Las deudas son más importantes de lo que se dijo y hay del año pasado. Tenemos que defender nuestros derechos, nuestra vida y a nuestras familias. Por respeto a la afición vamos a jugar mañana y dejarnos la piel en la pista, como hemos hecho todos los días. El lunes vamos a presentar formalmente una huelga”, leyó Mumbrú. No depondrán su actitud “hasta que se regularicen los pagos y la situación”.
Raúl López se encargó de aclarar si alguien de la nueva directiva que pretende entrar se había puesto en contacto con ellos al hilo de las últimas noticias: “No nos han dicho nada, querían hablar con nosotros (el lunes), no tenemos ni idea de lo que ha pasado”. Y todo esto, en medio de una enorme tensión, con José Cobelo, mano derecha de Gorka Arrinda y director deportivo oficioso hasta hace nada. Ojo, su protesta no va contra los dirigentes que pretenden aterrizar, sino contra Arrinda y su socio, aunque son agentes de varios de ellos: “No estamos contra los nuevos gestores, lo que queremos es encontrar una solución solo queremos hacer eso”, dejó bien claro Hervelle. “Los actuales no llevan el control de todo esto, estamos aquí sentados porque sabemos bastante poco”.
El técnico, Rafa Pueyo, secundó la medida, claro: “Apoyamos la decisión de los jugadores”. Mumbrú escribió en Twitter que de pequeño le enseñaron que nadie debía reírse de él. ¿Cree que les han faltado al respeto? “Si no es así, nos ha dado esa sensación”, refrendó el capitán. “Llevamos varios meses y muchas reuniones, se nos han prometido cosas que nunca han pasado, es momento de tomar decisiones”.
Hervelle se quejó de la desinformación. “Nunca sabemos nada y todo se filtra a la prensa, la verdad nunca nos llega”. A Grimau nunca le había pasado algo parecido, ni remotamente: “A principio de temporada cada uno negoció su contrato. Cuando llegamos se nos presentó un plan de pagos, sin opción por parte de los jugadores a decir que no. De ese plan ha habido algún cumplimiento, poquitos. En poco tiempo acumulamos meses seguidos sin cobrar, sumados a medios pagos que no son una nómina… se va acumulando todo. No nos podíamos quedar con los brazos cruzados; si no hacemos nada va a seguir esto así hasta junio. Tenemos la sensación de que no vamos a ver un euro más hasta que acabe la temporada”.
Por tanto, desde el lunes el equipo no se entrenará y si no cobra, no jugará en ocho días en el Palau. “Nos planteamos todo en conjunto –agregó de nuevo el capitán-. Salieron muchas cosas: no jugar el domingo, plantarnos…. Lo que nos ha mantenido es el músculo de Miribilla, la gente… sería injusto para ella, que ha comprado las entradas”.
Gabriel ya ha vivido en el Estu apuros como los actuales: “Nos sentimos manipulados, se puso una fecha, el 20 de enero, para que si no había solución nos pudiéramos ir; antes de esa fecha se dice que está solucionado, en equis semanas no llega nada.... Se habla de la entrada de un nuevo grupo y cuando el espónsor está cerrado, luego se retira. Optamos por defender nuestros derechos, ya basta de sentirnos manipulados”.
Grimau finalizó dejando claro que ya sólo les valen los hechos: “Con lo que llevamos… ha habido muchas palabras, trescientas mil reuniones, cada vez que había un atisbo de esperanza llegábamos a entrenar con una sonrisa estúpida. Hay pocos sitios en la Liga donde vengan nueve mil personas cada partido; eso nos ha mantenido hasta ahora, su fuerza. Ya no podemos más”. La solución se atisba complicada pero el principio de la misma pasa por la salida inmediata de Gorka Arrinda, que mañana puede vivir un infierno en Miribilla.