En el Bilbao no pasa un día sin un sobresalto. Tras los primeros gritos en Miribilla contra Gorka Arrinda, ha tomado protagonismo Katsikaris­. Harto de que no le coja el teléfono el que un día fue uno de sus agentes, demandará al club si antes del lunes no cobra lo que le deben, que según ciertas fuentes se acerca a 400.000 euros. Para más enredo, ha contratado a Fernando García Macua, expresidente del Athletic, como abogado.

Macua estuvo muy unido a Arrinda en su etapa al frente del Athletic. El consejero delegado del Bilbao permaneció cerca del abogado en ciertas operaciones. Katsikaris pertenece a una agencia de representación que rompió su vínculo con Arrinda. Lo mismo pasó con Vasileiadis, que también se plantea denunciar.

El club, a través de Cobelo, se reunió con las peñas para explicar que dejan una puerta abierta a la sucesión si alguien asume la deuda y garantiza los contratos, y que 800.000 euros podrían bastar para cerrar este curso. Esperan recibir un kilo en febrero. Había prevista una reunión con los posibles compradores del club y no se celebró. Un jugador se irá si siguen los impagos.