La Final de la NBA agotará sus siete turnos (con el séptimo partido el jueves, en Miami), después de la angustiosa victoria de Miami Heat sobre San Antonio Spurs que empata a tres la serie: 103-100, tras prórroga. Los Spurs vencían por 89-94 a sólo 28 segundos del final del tiempo reglamentario, tras doble regalo de LeBron James en dos malos ataques y cinco puntos en cascada de Tony Parker. Pero Ginóbili y Kawhi Leonard fallaron sendos tiros libres cruciales en esos 28 últimos segundos. James se reivindicó con su único triple del partido que imponía el 92-94, a 20 segundos del fin… y con 92-95 para los Spurs, a sólo cinco segundos del minuto 48 (tras el tiro libre de Leonard), Chris Bosh cazó el rebote ofensivo de un mal tiro de James, un triple a la desesperada. Con Tim Duncan recién sentado por su entrenador, Gregg Popovich (tras el tiro libre de Leonard), Bosh se hizo valer, reboteó y sirvió el balón a Ray Allen, quien empató a 95 con su único triple de la noche (1/3), desde la esquina derecha de la pista del American Arlines Arena de Miami, ante el delirio de 19.900 espectadores.

En la prórroga, la fatiga y el desgaste cayeron visiblemente sobre las grandes estrellas de los Spurs, Tony Parker (19 puntos, ocho asistencias… 6/23 en tiros) y Timmy Duncan: 30 puntos y 17 rebotes, con 17/21 en tiros… pero sin anotar en el último cuarto ni en esa prórroga, donde los Spurs aún ganaban por 97-100 a 2:30 del desenlace. Pero el club de San Antonio ya no volvió a anotar, Ginóbili perdió el balón en dos entradas decisivas… y ‘Bron’ James y Allen empuñaron la puntilla: 32 puntos (11/26 en tiros), 10 rebotes y 11 asistencias para ‘King’ James, que se quitó incluso la cinta blanca del cráneo, y nueve importantísimos puntos para Allen. Chris Bosh aportó a los Heat 10 puntos, 11 rebotes y dos tapones vitales: uno sobre Parker, en la prórroga y con 101-100, y el que bloqueó el intento triple agónico de Danny Green sobre la sirena final de la prórroga. Green también se mostró fatigado, con tres puntos y 1/7 en tiros.

Todo apunta a que los Spurs han perdido una oportunidad grandiosa y que su situación se vuelve casi desesperada ante el séptimo y último acto del jueves. Tras 44:26 de acción en pista, Duncan apenas podía correr al fin de los 53 minutos de juego. Parker (42:39 en pista) aparentaba estar exhausto y con 101-100, a 32 segundos, vio cómo su última suspensión del partido se quedaba clavada en el tapón de Bosh.

Los Spurs llegaron al descanso con ventaja de 44-50 tras un parcial de 0-11 para cerrar un primer tiempo en el que Duncan anotó…25 puntos. Un triple de Ginóbili abrió la segunda parte: 0-14 y 44-53. En el minuto 30, Miami se había acercado hasta 56-57, pero ahí, los mejores minutos de los Spurs impusieron el 58-71, con 65-75 al fin del tercer cuarto. La defensa ‘spur’ alternaba zonas de ajuste que cerraban los pasillos al aro de San Antonio más cambios individuales de Leonard (22 puntos) y Parker sobre LeBron James. En el último cuarto, los Heat pasaron al frente con 85-82, a 5:82 del tiempo reglamentario tras un parcial de 22-7. “Ahora necesitamos nuestra mejor defensa de los playoffs, pero sin frenesí, sin acelerarnos y ejecutando bien”, demandaba Erik Spoelstra, entrenador de Miami.

En esos instantes brillaron el competitivo Mario Chalmers (20 puntos, 4/5 en triples) LeBron, con 'slam dunks' más tapón descomunal a Duncan, Wade (14 puntos)… y Mike Miller, quien logró tres de sus ocho puntos al acertar uno de sus dos triples (2/2)… descalzo tras haber perdido la zapatilla de juego del pie izquierdo. A 87 y 58 segundos del final, cinco milagrosos puntos de Parker, incluido un triple sideral ante LeBron, devolvieron a los Spurs una ventaja que parecía la sentencia, pero que al final acabó arrojada por la borda. Los Spurs gobernaron la cuenta de rebotes (42-45), pero los Heat tiraron mejor: 46,9%-43,5%, con 57,9% en triples (11/19) y también repartieron más asistencias: 23-13. “Dimos todo lo que teníamos… sé que cometí dos errores cruciales en dos malas jugadas, en el último minuto del tiempo reglamentario, pero luego acerté con buenos tiros. Puedo aceptar esos errores si todo ha terminado como ha terminado… y yo lo he dejado todo en la pista. Somos los dos mejores equipos de la NBA, extendidos hasta el último partido de la temporada”, analizó LeBron James, a quien Leonard y Parker hostigaron hasta el límite. “Sabíamos que hasta el último momento siempre teníamos una oportunidad, lo habíamos hablado”, resumió Ray Allen. Es cierto: ahora, la gran oportunidad es para el vigente campeón: Miami.