LAKERS 118 - WARRIORS 116
Pau rescata a los Lakers y Kobe se rompe el tendón de Aquiles
El español evitó una derrota que hubiera sido definitiva gracias a su ‘triple doble’: 26 puntos, 11 rebotes y 10 asistencias. Kobe Bryant dice adiós a la temporada.
Pau Gasol cerró su mejor y más decisivo partido en esta temporada 2012-13 con un ‘triple doble’ de 26 puntos (9/13 en tiros), once rebotes y diez asistencias que rescató a los Lakers de lo que hubiera sido una derrota definitiva. La sensacional actuación de Gasol, a quien el aro escupió un tiro que habría sellado la victoria, a 11,9 del final, rubricó el dramático 118-116 con que los Lakers batieron a los Golden State Warriors de un monumental Stephen Curry: 47 puntos, con 17/31 en tiros y 9/15 en triples. Los Warriors mandaban por 98-107 a 6:49 del fin… y los Lakers empataron a 109, a 3:08, con los dos últimos puntos de los 34 que consiguió Kobe Bryant (9/21 en tiros), quien ahí se fue al vestuario cojeando claramente del pie izquierdo tras concretar, ya cojo, los dos tiros libres del empate a 109. La lesión se había producido al escurrirse el pie izquierdo de Kobe, desequilibrado en falta nada dura por Harrison Barnes. Gasol preguntó a Barnes si había golpeado a Kobe. “Y cuando Barnes me dijo que no, supe que Kobe tenía algo serio en el tendón de Aquiles”, explicó Pau. Hasta ahí, Bryant venía ofreciendo otra de sus actuaciones milagrosas y flotaba en una secuencia de ocho puntos consecutivos, incluidos dos triples. “No tengo palabras para describir lo que Kobe está haciendo por este equipo a lo largo de toda esta temporada, es algo increíble. Su lesión es un duro golpe para todos los que le queremos y respetamos”, dijo Pau Gasol, de forma emotiva, al final del dramático triunfo. Pau estaba al borde de las lágrimas.
“No puedo andar y no puedo poner presión sobre la planta. El pie no funciona. Nunca me ha pasado nada semejante. Sé que tendré que operarme, pero está de broma el que piense que yo he acabado aquí”, dijo en el vestuario Kobe Bryant: con lágrimas en los ojos.
Con 113-113 y con 117-116 para los Lakers, tras dos tiros libres de Blake, Carl Landry (once puntos) erró dos lanzamientos claros que podían haber volcado la noche a favor de los Warriors. Un tiro libre de Howard facturó el 118-116 definitivo que mantiene a los Lakers en el octavo puesto del Oeste, cuando una sombra negra se alza ante ellos. La emoción del dramático triunfo no esconde la sombría realidad de los Lakers, puestos de cara ante la que puede ser la lesión más importante en la carrera de Kobe Bryant: en ese mismo vestuario de los Lakers, los fisioterapeutas y médicos del club avanzaron la posibilidad casi cierta de un desgarro en el tendón de Aquiles del pie izquierdo que, directamente, pondría fin a la temporada de Bryant, el hombre que es alma y guía de los Lakers. El diagnóstico definitivo llegará después de la resonancia magnética a que será sometido hoy el pie izquierdo de Kobe Bryant, que no había descansado un solo minuto en el partido anterior, en Portland… ni en este de los Warriors. “Todo lo que ha hecho Bryant es increíble”, se rindió Mike D’Antoni, entrenador de los Lakers, que mañana, reciben a los San Antonio Spurs en Los Angeles… y sin Kobe Bryant, con toda seguridad. En San Antonio, los Spurs ganaron a los Kings por 108-101 con 22 puntos y diez asistencias de Tony Parker, más 18 puntos de Tim Duncan y ‘doble doble’ de Splitter: 12 puntos, 12 rebotes. Cousins (19 puntos, 12 rebotes) hizo lo mejor de los Kings.
Con el ‘triple doble’ de Gasol los 34 puntos de Bryant, más 28 puntos de Dwight Howard (14/22 en tiros libres) y 14 de Steve Blake (4/8 en triples) los Lakers pudieron escapar al salvaje asalto desencadenado por Curry (cuyo intento triple final desde su propia pista casi hace diana…), que encontró refuerzos en Klay Thompson (25 puntos) y David Lee: 19 puntos, ocho rebotes. Increíblemente (y sin Andrew Bogut), los Warriors dominaron los rebotes (44-51), pero su predilección por el tiro exterior les hizo perder en porcentaje de aciertos: 51,5%-47,4%.
La victoria más pírrica de la temporada deja a los Lakers octavos del Oeste, en balance de 43-37, siempre con Utah Jazz a los alcances: ahora, los Jazz van en 42-38 después de vencer por 107-100 a los Minnesota Timberwolves, en Salt Lake City y en un final apretado: en el último cuarto se ingresó con un mínimo 82-81 para Utah, que salió adelante gracias a 40 puntos (más 13 rebotes y seis asistencias) del tremendo Al Jefferson. Esos 40 puntos igualan la plusmarca personal de Jefferson. Ante los ‘jazzmen’ Randy Foye y Mo Williams (ambos en 16 puntos) brillaron los bases y escoltas de Minnesota: el portorriqueño J. J. Barea (23 puntos), Luke Ridnour (diez puntos)… y Ricky Rubio: 13 puntos (4/7 en tiros, 2/3 en triples), tres asistencias y dos rebotes en 25:29 de acción. Los dos triples de Ricky, seguidos, colocaron a los Wolves con ventaja de 97-98, a 3:52 del final. Pero ahí irrumpió Jefferson, que decidió la situación en ausencia de Nikola Pekovic, quien no jugó un solo minuto a causa de una contusión en el gemelo.
Los Lakers (?) podrían incluso dar caza a los Houston Rockets en el séptimo puesto del Oeste, dado que los Rockets, séptimos, se quedan en 44-35 después del triunfo de los Memphis Grizzlies en Houston: 78-82, con 15 puntos, 12 rebotes y cinco asistencias para Marc Gasol (5/13 en tiros), a lo largo de 35:38 en pista. Con 15 puntos y ocho rebotes, Zach Randolph consolidó el trabajo de Marc. Ni 30 puntos de James Harden (al que esta vez no le entró un tiro vital), ni 17 de Jeremy Lin, ni la superioridad en rebotes (51-44) salvaron a los Rockets, condenados por su horrible 31,1% de acierto en tiros de campo. Memphis tampoco fue muy allá (34,4%). Decidió la potencia interior de Marc y Zach, que se combinaron para un 10/25 en tiros y 10/11 desde la línea de personal. En Dallas, los Mavericks, ya fuera de playoffs, produjeron una inútil victoria en prórroga sobre los Denver Nuggets, que venían de ganar cinco partidos seguidos: 108-105, con 20 puntos de O. J. Mayo para unos Mavs a los que lideraron sus dos grandes veteranos: Vince Carter (22 puntos, 12 rebotes) y Dirk Nowitzki: 22 puntos, diez rebotes. Los Nuggets recuperan a Ty Lawson pero ya se olvidan de la segunda plaza del Oeste. En fin y en Nueva Orleans, Chris Paul, ‘CP3’, apuntilló a su exquipo, los Hornets: CP3 (14 asistencias) firmó ocho de sus 17 puntos en el último minuto, para dar a los Clippers un ajustado éxito por 93-96. Blake Griffin (20 puntos) y Matt Barnes (16 puntos, diez rebotes) ayudaron mucho a Paul, que se las tuvo tiesas con un excelente Eric Gordon: 25 puntos. Eso, cuando toda la NBA mira al pie izquierdo de un tal Kobe Bryant…