El Real Madrid más prudente espera hoy al mejor Maccabi

Ahora esperamos al mejor Maccabi", asegura Carlos Suárez. "No creo que se repita un parcial como el del segundo cuarto (24-1)", opina Sergio Rodríguez. "¡Anda que no queda! Si pensáramos que ya hemos conseguido algo, estaríamos muy equivocados. La derrota hará unirse al rival. Esta vez nos encontraremos con un Maccabi más fuerte", rubrica Pablo Laso.

La lección parece aprendida, la que le dio el Siena al Olympiacos hace dos años. El equipo griego venció por 48 (89-41) en el primer encuentro y el italiano ganó los tres siguientes y se coló en la Final Four. Ese es el premio y bien vale conectar todas las alertas, por si las moscas, porque el Maccabi­ puede rehacerse y el Madrid deshacerse, al menos un ratito, por un vaivén, una racha o una ráfaga que le coja a la intemperie. Y es que de un posible 1-1 a un 2-0 media un abismo. De eliminatoria abierta a pase casi cantado. Debe pesar el factor cancha, la novedad del viernes ha funcionado muy bien en el Palacio, aunque las entradas cuestan más del doble que las del domingo ante el Obradoiro.

"El Madrid hizo las cosas a las que está acostumbrado y eso no podemos permitirlo", afirma David Blatt, al que el Palacio siempre le traerá buenos recuerdos. En la calle Goya ganó en 2007 el oro con Rusia volteando los pronósticos y a España. Su fórmula para repetir es sencilla, casi obvia: "Tenemos que anotar, rebotear y cuidar el balón".

Mirotic. El miércoles el Madrid anotó once triples (50% de acierto), cogió 16 rebotes más, jugó en transición, repartió 20 asistencias (diez de Sergio) y defendió a gran nivel. "Subimos líneas y estuvieron muy incómodos", explica Suárez. Si el Madrid tira, defiende, corre y rebotea, el Maccabi, con menos fondo de armario, sufrirá de nuevo. Ricky Hickman, Devin­ Smith y Shawn James son sus piezas claves. Y atención al duelo entre Mirotic, tras su "calentón" con Laso, y Caner-Medley­. Aguarda la Final Four.