El Fernando Buesa Arena de Vitoria recibió con una sonora pitada al Rey Juan Carlos I a su llegada al palco de autoridades, desde donde presencia la final de la Copa entre Barcelona y Valencia Basket.

Instantes antes, una buena parte de los aficionados presentes en el pabellón ya pitaron el himno nacional, pero la intensidad de los pitidos aumentó considerablemente cuando el monarca hizo acto de presencia en el palco.

Al terminar el partido Don Juan Carlos entregará la copa que lleva su nombre al equipo ganador del torneo, que subirá al palco a recoger el trofeo. En el palco de autoridades también están el ministro de Educación y Cultura, José Ignacio Wert; el lehendakari, Iñigo Urkullu, que el pasado 21 de enero fue recibido por el Rey en el Palacio de la Zarzuela.

El monarca volvía a presidir una final copera dos años después de la última disputada en Madrid, ya que la temporada pasada se ausentó de la final celebrada en el Palau Sant Jordi de Barcelona.