El Bizkaia Bilbao Basket se adelantó en la eliminatoria de cuartos de final de la Liga ACB después de vencer por 72-79 al Power Electronics en Valencia, tras completar un magnífico encuentro ante un conjunto valenciano que este viernes dio su peor versión de la temporada.

El conjunto vasco llegó con la lección muy bien aprendida y superó a los pupilos de Pesic que esta tarde noche ofrecieron su cara B. El equipo valenciano está obligado a ganar el domingo en Bilbao si quiere volver con la eliminatoria a Valencia el próximo martes.

El Bilbao comenzó mucho más metido en el partido y con las cosas más claras que su rival. Katsikaris lanzó un mensaje por la forma en la que jugó su equipo: había que no dejar pensar a los jugadores del Power y ahogar su salida y una zona en defensa.

Los de Pesic no se mostraron cómodos en la pista y su primera canasta, un triple de Savanovic, no llegó hasta pasados tres minutos y medio de encuentro. Con el despertar del serbio, despertó el equipo, pero el choque cayó en una fase de precipitaciones y errores por parte de ambos conjuntos.

Pesic no encontro la tecla

El Power no encontró un quinteto regular que le diera ritmo al partido. Pesic movió el banco con el objetivo de dar con la tecla correcta, pero sin Savanovic en la pista el conjunto valenciano se vio perdido. El que sí que armó un quinteto de garantías fue Katsikaris. El griego supo mover a sus peones y dar el primer tirón del encuentro 16-24 (min. 13).

El conjunto vizcaíno se sintió muy cómodo con ese colchón de diez puntos y a pesar de los esfuerzos de los locales por limar distancias, se mostró sólido, gracias a un ataque más clarividente.

Los ''taronjas'' desplegaron un ataque atropellado, sin un patrón claro de juego y ante un rival que combinó una defensa al hombre y una defensa zonal que hizo mucho daño. Un triple de Cook colocó el 33-36, pero en ese momento, el Power Electronics volvió a sufrir otro cortocircuito y los de Katsikaris se fueron al descanso nueve arriba (37-46) y con la sensación de haber hecho un gran trabajo.

El inicio de la segunda mitad no tuvo nada que ver con el del arranque del partido. Ahora sí el Power salió enchufado y cinco puntos seguidos lo volvieron a meter en el encuentro en un abrir y cerrar de ojos.

Sin embargo, el Bilbao Basket recuperó el ritmo de crucero de la primera mitad y volvió a separarse diez puntos por arriba de su rival gracias a una buena defensa y la precipitación en el tiro de los naranjas. El partido cayó en un guerra de guerrillas y llegó a ensuciarse con una enfrentamiento entre Lishchuk y Warren sin balón de por medio.

El Power tiró de orgullo en el último cuarto y llegó a colocarse seis por abajo 60-66 (min. 34). Ahí empezó a creerse que podía ganar un encuentro que se había puesto muy complicado. A base de garra y coraje se llegó a colocar dos arriba (68-70), pero el conjunto vasco hizo un último esfuerzo para llevarse una valioso victoria.