Los de Molin ahogan sus penas a la carrera

Con nada en juego y sin obligaciones, más allá de rendirle a Louis Bullock el homenaje que se merecía, el Madrid se soltó para aliviar penas. Ahogó en contraataques el amargo recuerdo de la Final Four y volvió a ganar con comodidad dos meses después (la última vez fue con la visita del Meridiano). Rompió al Cajasol en el tercer cuarto (59-41), algo inusual. Pero el partido tampoco era común, porque el Madrid corrió como nunca y tuvo en Sergio Rodríguez a su estrella: 19 puntos y 6 asistencias. Repartió alley-oops y dominó en campo abierto, aunque los títulos se suelen ganar en media pista y pasando los bloqueos como un jabato en defensa. El talento de Sergio es tan indiscutible como que aún le queda dar el estirón.

Los vítores se los llevó Bullock y los pitos, Tucker, objeto de todas las iras. Quien estuviera de nuevas en la grada pensaría que es el único culpable de los males blancos. Al final, el Madrid cerró invicto en casa la liga regular por primera vez desde 1983. Duelo redentor.

Bullock: "No me esperaba tanto cariño"

Bullock salió del Madrid el pasado verano después de seis temporadas. El club blanco le homenajeó ayer y también sus seguidores, que se quedaron para ovacionarle al final del partido. Se emocionó. "No esperaba tanto cariño, que la gente se volcara así. Esta es mi casa", dijo Bullock.