¿Qué significa que se prolongue el tope del gas hasta finales del 2024?

El tope del gas fue una de las medidas más destacadas adoptadas por el Gobierno el pasado año, después de que consiguiera en marzo del año pasado el visto bueno de Bruselas en el Consejo Europeo que reunió a los jefes de Estado de la UE.

Un mecanismo que entró en vigor el pasado 15 de junio, y que permitió tanto a España como a Portugal topar el precio del gas para la generación de electricidad en una horquilla que oscila entre los 45 y los 50 euros por megavatio hora (MWh), y abaratar así el precio de la luz, que alcanzó precios desorbitados a inicios de 2022. Durante los primeros seis meses de la vigencia de la medida, se topó a 40 euros/MWh y posteriormente, hasta los 45 euros.

Dicho precio se mantendrá hasta mayo, mes en el que finalizará la medida. Sin embargo, el objetivo del Gobierno es prolongar la vigencia del mecanismo más allá de ese mes, en concreto, hasta finales del 2024 tal y como anunció la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, en declaraciones al programa ‘Espejo Público’ de ‘Antena 3′. “Tenemos intención de pedir que, hasta que no se modifique la regulación europea, se siga aplicando esta excepción ibérica”.

Asimismo, Ribera explicó que el Ejecutivo también pedirá a Bruselas que se mantenga en los mismos niveles que hasta ahora, es decir, entre los 40 y 45 euros. “La factura del gas no puede más de un 5% por trimestre”, resaltó la vicepresidenta. Asimismo, destacó que desde el Gobierno “están reivindicando una remodelación del funcionamiento del mercado eléctrico que trasladarán a la Comisión Europea”.

Por el momento, la Comisión Europea estableció en diciembre el decreto de un tope al gas en todo el continente que entrará en vigor a partir del 15 de febrero, aunque con un límite de 180 euros el megavatio hora (MWh), una cifra superior a la que está fijada en Madrid y Lisboa, y que sólo se activa solamente cuando el precio supere ese máximo durante tres días seguidos, y cuando la diferencia respecto al mercado global sobrepase los 35 euros.

Mantener el ahorro en la factura eléctrica como principal objetivo

Prolongar la ‘excepción ibérica’ supondría mantener el ahorro en la factura eléctrica para los españoles, así como la reducción de los precios al contado del mercado de la electricidad. Hasta ahora, el tope al precio del gas supone un coste para los consumidores de 8.400 millones de euros, de los que 6.300 son asumidos por los españoles.

La modalidad de dicha ayuda se estableció mediante el pago directo de una subvención a los productores de electricidad, para así financiar parte de sus costes. El pago diario se calcula con la diferencia de precio entre el precio de mercado del gas natural y un límite máximo del precio del gas fijado en una media de 48,8 euros por megavatio mientras dure la medida. Los únicos que no se verán beneficiados serán quienes tengan contratos con precios fijos a largo plazo, con un vencimiento más allá del año de aplicación.

De este modo hasta que se apruebe la modernización del sistema eléctrico europeo, y con la prolongación de la medida, el Ejecutivo español espera a que ambas medidas contribuyan a dar “estabilidad” a los precios a lo largo de este año. El 37% de los hogares acogidos al PVPC se ven beneficiados por la reducción del precio en sus facturas gracias al tope del gas.