El plan de Alemania para legalizar el cannabis
El Gobierno teutón redacta las primeras claves del proyecto de ley que legalizará la droga en el país: hasta 30 gramos y tres plantas en casa por persona mayor de edad.
El Gobierno de Alemania ha definido las principales líneas para el proyecto de ley que legalizará el cannabis en el país. Entre las principales claves estará la autorización para comprar la droga, poseer hasta 30 gramos y tener plantas en casa con el único destino del consumo propio.
El consejo de ministros del país acordó el miércoles abrir una vía para despenalizar el cannabis y el tetrahidrocannabinol (THC), presente en algunos productos como la marihuana o el hachís. La iniciativa ha sido lanzada por el tripartito del gobierno en Berlín, formado por la SPT, Die Grünnen y FDP, cuyo borrador plantea la posibilidad de tener hasta “tres plantas femeninas en flor por persona mayor de edad” en casa, siempre que estén fuera del alcance de los menores.
También se baraja la autorización para vender derivados del cannabis para fumar, inhalar o consumir de otra manera, pero se prohibirá el consumo de la droga en galletas, magdalenas y otro tipo de dulces. En todo caso, el Gobierno de Alemania estudia establecer un límite máximo de cannabis para los menores de 21 años “ante el elevado riesgo de daños cerebrales por el consumo de cannabis en la adolescencia”.
“La legislación más permisiva de toda la Unión Europea”
El ministro de Sanidad, Karl Lauterbach, ha señalado que la normativa “será, cuando culmine, la legislación más permisiva de toda la Unión Europea” y que su medida no será de “liberalización” como la neerlandesa, sino de “regulación”. Uno de los objetivos de Alemania es poner freno al mercado negro de la marihuana y el hachís, así como de las redes criminales que lo controlan.
De hecho, la venta de estas sustancias se podrá hacer en establecimientos que tengan la licencia correspondiente, por lo que no necesariamente se podrá adquirir únicamente en las farmacias. Lauterbach considera que la iniciativa es “una prioridad” para proteger a los menores de las drogas, cuya distribución “florece” en los mercados negros.
Pero no todos están de acuerdo. En Alemania, que tiene autonomías como España (los llamados Länder), el estado federado de Baviera se ha opuesto de forma rotunda y considera que el país se encamina a ofrecer un “turismo de drogas”. En todo caso, el documento oficial final no se presentará hasta tener la seguridad de que cumple con t oda la normativa europea.