Descubren a un jefe de la mafia trabajando en una pizzería
Edgardo Greco llevaba prófugo 16 años después de que fuera condenado a cadena perpetua por un doble asesinato en el año 1991.
Las autoridades francesas detuvieron este jueves al mafioso Edgardo Greco en Saint-Etienne (Francia), donde utilizaba el nombre falso de Paolo Dimitrio y trabajaba como pizzero en el restaurante italiano Caffe Rossini. Asociado con la ‘Ndrangheta calabresa, una de las mayores organizaciones criminales del país, Greco llevaba 16 años prófugo después de que fuera condenado a cadena perpetua por un doble asesinato (el de los hermanos Stefano y Guiseppe Bartolomeo) en el año 1991.
Greco, de 63 años, huyó de Italia en 2006 tras escapar de la custodia policial, lo que provocó que la misma Interpol comenzase a buscarlo. Además del doble asesinato, se le acusa de haber intentado matar a Emmanuel Bartolomeo y a Emiliano Mosciaro, todo ello en una de las llamadas ‘guerra de mafias’ entre las bandas Pino Sena y Perna Pranno, que marcó la primera parte de la década de 1990.
La detención ha sido posible gracias a la colaboración de la Interpol, de la Brigada Nacional de Búsqueda de Fugitivos de Francia (BNRF), la policía de Cosenza (localidad donde nació Greco) y del fiscal jefe de Catanzaro, Nicola Gratteri. Según explica el diario italiano Repubblica, Greco estaba pendiente de una orden de detención europea emitida por la Fiscalía General de Catanzaro y llevaba al menos tres años trabajando como pizzero en el restaurante de Saint-Etienne, localidad donde se instaló en 2014.
Según el diario francés Le Monde, los clientes de su restaurante le apodaban “Rocco”, aunque el se presentó con el nombre de Paolo Dimitrio. A pesar de ser buscado por la propia Interpol, Greco llegó a posar en julio de 2021 para un reportaje de su restaurante en el periódico Le Progrés. En la foto del siguiente tuit se puede ver a Greco a la izquierda de la imagen.
“La actividad de las fuerzas policiales es incesante, silenciosamente comprometida día tras día, en Italia y en el extranjero, en un trabajo continuo para proteger la seguridad de los ciudadanos”, celebró el ministro del Interior, Matteo Piantedosi, según un comunicado de su cartera. “Gran satisfacción por esta importante operación realizada también gracias a las importantes sinergias desarrolladas en el marco de una red de cooperación internacional entre las fuerzas policiales. Continúan las detenciones de prófugos peligrosos”, aplaudió.
La detención de Greco se produce tan solo dos semanas después de que los carabinieri arrestasen al también mafioso Matteo Messina Denaro, el último líder de la Cosa Nostra y el capo más buscado en Italia. Tras 30 años fugado de la justicia, Messina Denaro fue detenido el pasado 16 de enero en Palermo mientras desayunaba en un bar de la localidad, justo antes de entrar en una clínica privada en la que se estaba sometiendo a un tratamiento oncológico. La primera ministra del país, Giorgia Meloni, calificó el arresto como “una gran victoria para el estado, que demuestra que no se rinde ante la mafia”. “Otro jefe del crimen organizado es llevado ante la justicia. Mi más cálido agradecimiento, junto con el de todo el gobierno, para las fuerzas policiales [...] por la captura del más significativo exponente del crimen mafioso”, celebró entonces Meloni.