Pago automático de $1,000 para los recién nacidos: cómo reclamara y quiénes son elegibles

A partir de ahora, cada bebé nacido en Estados Unidos podrá obtener un impulso financiero, ya que el gobierno federal depositará automáticamente $1,000 dólares en una cuenta de ahorro llamada Trump Accounts. Estas cuentas, creadas bajo la ley One Big Beautiful Bill Act, están diseñadas para que los niños inicien su vida con un ahorro destinado a educación, vivienda o emprendimiento.

¿Quiénes califican y cómo reclamar el bono?

• El depósito de $1,000 dólares está disponible para bebés nacidos entre 1 de enero de 2025 y 31 de diciembre de 2028. Es necesario que tengan un número de Seguro Social y que sus padres o tutores abran la cuenta.
• Los padres u otros tutores deben presentar el formulario oficial del IRS para activar la cuenta; aunque ya se puede optar por este mecanismo, las aportaciones no podrán comenzar hasta el 4 de julio de 2026.
• Además del aporte gubernamental, familiares, amigos, empleadores, instituciones o entidades filantrópicas pueden contribuir hasta $5,000 dólares al año por niño.

Para niños que no nacieron dentro del periodo 2025-2028, no gozarán de los $1,000 dólares. En esos casos, gracias a una donación privada de Michael Dell y su esposa Susan Dell, quienes comprometieron $6.250 millones de dólares, muchos menores de 10 años en zonas de ingresos moderados podrán recibir un aporte de $250 dólares si cumplen ciertos requisitos.

¿Qué pasa con el dinero?

• Los fondos deben invertirse en fondos indexados del mercado accionario de Estados Unidos, con comisiones mínimas (no más del 0.10% anual) y estarán gestionados por instituciones financieras privadas.
• Los niños no podrán retirar dinero hasta que cumplan 18 años. En ese momento, la cuenta funcionará como una especie de IRA tradicional, donde podrán usar esos recursos para educación, vivienda, negocio propio o ahorro para el futuro.
• Si la familia decide contribuir año tras año y deja el dinero invertido a largo plazo, fuentes oficiales estiman que ese fondo podría crecer hasta $1.9 millones de dólares hacia los 28 años del niño.

El propósito declarado del gobierno y, de los impulsores del plan, es brindar a cada niño una “cabeza de ventaja financiera” desde el nacimiento, independientemente del origen socioeconómico. Las cuentas buscarían promover la cultura del ahorro y la inversión, fomentando que más familias participen en los mercados financieros desde los primeros días de vida.

Aseguran que su donación busca extender ese beneficio más allá de los recién nacidos, alcanzando a niños pequeños en familias de ingresos bajos o moderados. “Esta aportación privada dará un impulso real a millones de niños que de otra forma no habrían contado con esa ventaja desde el nacimiento”, señalaron tras hacer público el compromiso.

Este programa representa una apuesta audaz por cambiar la forma en que las nuevas generaciones en Estados Unidos interaccionan con el ahorro y la inversión desde su infancia.

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