La jefa de gabinetes Susie Wiles da polémica opinión sobre Donald Trump: “personalidad de alcohólico”

En un giro inesperado que sacude los pasillos del poder, la jefa de gabinete de la Casa Blanca, Susie Wiles, lanzó observaciones que han encendido un debate político sobre el presidente Donald Trump y el estilo con que ejerce la presidencia. En una serie de entrevistas inéditas con Vanity Fair, publicadas este martes, Wiles caracterizó al mandatario como alguien con una “personalidad de alcohólico”, a pesar de que Trump nunca ha consumido alcohol.

La descripción, recogida por el periodista Chris Whipple tras once conversaciones a lo largo del primer año del segundo mandato de Trump, buscaba ilustrar un temperamento intenso, dominante y con la convicción de “que no hay nada que no pueda hacer. Nada, cero, nada”, según Wiles.

La jefa de gabinetes y su polémica opinión sobre Trump

Wiles, una de las figuras más influyentes en la actual administración y arquitecta clave de la victoria de Trump en 2024, explicó que su comparación se basa en experiencias personales, ya que su padre fue alcohólico, lo que, dijo, le da un marco de referencia para hablar de “personalidades exageradas”.

La reacción no se hizo esperar. El presidente Trump, quien no bebe alcohol, respondió a través de una entrevista con The New York Post, según reporta Forbes, que reconoce este tipo de rasgos en sí mismo. Dijo que posee una “personalidad posesiva y adictiva” y que ha hecho comentarios similares sobre su carácter en el pasado. Añadió que Wiles ha realizado “un trabajo fantástico” como jefa de gabinete.

Pero la polémica no se limitó al comentario sobre la personalidad. En la misma serie de entrevistas, Wiles abordó aspectos conflictivos de la administración, desde críticas a la manera en que la fiscal general Pam Bondi manejó los documentos relacionados con el caso Epstein, hasta la descripción de J.D. Vance como alguien que ha sostenido teorías conspirativas durante años.

Tras la publicación, Wiles rechazó la presentación de sus declaraciones como un retrato negativo, calificando el artículo como un “ataque malintencionado y engañoso” dirigido no solo a ella, sino también a Trump y al equipo más cercano. En una publicación en redes, sostuvo que “gran parte de lo que yo, y otros, dijimos sobre el presidente y nuestro equipo fue omitido” para construir una narrativa caótica.

La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, salió en defensa de Wiles, describiéndola como “la asesora más leal” del presidente y subrayando que toda la administración “está unida y agradecida por su liderazgo constante”.

Esta controversia se suma a un clima político ya tenso en Washington, donde las tensiones internas dentro de la Casa Blanca y la relación de Trump con sus propios funcionarios han sido objeto de escrutinio mediático durante semanas. El impacto de los comentarios de Wiles podría extenderse más allá de los círculos políticos, alimentando discusiones sobre liderazgo presidencial, lealtad institucional y los límites de la franqueza en conversaciones con la prensa.

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