El mundo al revés: jugadores que divulgan el destino de periodistas
Damian Lillard y Derrick Favors han invertido los roles y, en tono irónico, han 'confirmado' los 'fichajes' de reporteros cercanos a sus equipos con otros medios.
Una de las labores del reportero de fuente es estar al tanto de las últimas novedades del equipo. Sumergirse en sus secretos, sus cotilleos, indagar sus decisiones, vivir su día a día, convertir el búnker del equipo en su segundo hogar. Un esfuerzo de inmersión e investigación exhaustivo que tiene como fin servir a los aficionados; dar luz a sus destinos, informarles de cada paso, cada detalle, cada cambio, cada catástrofe, cada portento. Los fichajes son una de las materias preferidas del reportero, porque es información con un inigualable carácter noticioso; las transacciones son millonarias; involucran tratos con agentes, promotores, fondos de inversión y conllevan notables reacciones sociales, incluso financieras. Eso sí, la batalla por la información, por la cita y la confirmación, en la época de la inmediatez y en plena vorágine competitiva entre medios, es encarnizada.
Los jugadores pueden encontrar incómodos los rumores que los sitúan en otros equipos. Sienten en riesgo una negociación, aquejan falta de diligencia y que la divulgación afecta su relación con su entorno y con el equipo; y, en algunos casos, sentencian que el trascendido es absolutamente falso. Por ello, a modo de ironía, dos jugadores de la NBA han 'confirmado' a través de sus cuenta de Twitter que dos periodistas cercanos a sus equipos han 'cambiado de equipo', de redacción. Los roles han cambiado.