Gastronomía
Un ingeniero pone punto final al debate sobre una pizza familiar o dos medianas: “Es mejor desde todos los puntos de vista”
Usando principios básicos de matemáticas, geometría y análisis de coste, David Gozalo aclara si es mejor pedir una pizza grande o dos medianas con datos de Domino’s.
La pizza es uno de los platos más populares y queridos en todo el mundo. Desde su nacimiento en Italia hasta convertirse en un fenómeno global, la pizza ha conquistado los corazones de millones de personas con su versatilidad, su delicioso sabor y la infinidad de combinaciones que permite.
Sin embargo, en el momento de decidir qué tipo de pizza comprar, surge un dilema común: ¿es mejor optar por una pizza familiar o aprovechar las ofertas de dos pizzas medianas? Usando principios básicos de matemáticas, geometría y análisis de coste, el ingeniero David Gozalo ha aclarado a través de un vídeo en YouTube cuál es la mejor opción con datos aportados por el restaurante Domino’s.
El joven ha hecho un análisis partiendo del diámetro y el precio de ambas opciones. Con un diámetro de 29 centímetros para las medianas y un precio de 8,95 euros, y teniendo en cuenta que se comprarían dos unidades, se obtendrían 1.321 cm cuadrados de pizza de esta manera. Mientras que si comprásemos una pizza grande por 17,95 euros de 38 centímetros de diámetro podría comer 1.134 centímetros cuadrados de pizza. Ergo, sería mejor comprar dos medianas tiendo en cuenta la cantidad de pizza que podríamos comer.
Asimismo, Gozalo ha calculado también cuántos centímetros de pizza se podrían comer por euro invertido. En el caso de las grandes, se tocaría a 63,17 cm; 73,72 cm si se comprasen dos medianas. Por lo tanto, sería también más rentable comprar dos medianas para maximizar la inversión. Más si cabe teniendo en cuenta que podríamos tener dos especialidades diferentes.
El origen de la pizza: de Nápoles al mundo
La historia de la pizza se remonta a tiempos antiguos, aunque la versión moderna que conocemos hoy tiene sus raíces en Nápoles, Italia, durante el siglo XVIII y principios del XIX. En aquella época, la pizza era un alimento sencillo, preparado por los habitantes más humildes de la ciudad. Consistía en una base de masa plana, cubierta con ingredientes baratos y fácilmente accesibles, como aceite de oliva, hierbas y, en ocasiones, queso y tomate.
Se cuenta que la pizza tal y como la conocemos comenzó a tomar forma en 1889, cuando el rey Umberto I y la reina Margherita de Saboya visitaron Nápoles. En su honor, un pizzaiolo (pizzero) llamado Raffaele Esposito creó una pizza especial que representaba los colores de la bandera italiana: tomate rojo, mozzarella blanca y albahaca verde. Esta pizza fue nombrada “Pizza Margherita” en honor a la reina, y se convirtió en un símbolo de la gastronomía italiana.
A lo largo del siglo XX, la pizza se fue popularizando en Italia y luego en otras partes del mundo, especialmente en los Estados Unidos, donde se hicieron importantes adaptaciones, como la pizza estilo Nueva York, la pizza Chicago deep-dish y muchas más. Hoy en día, la pizza es un platillo global que varía según las preferencias locales, pero mantiene su esencia como comida rápida, sabrosa y accesible.
Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.