Cuenta para qué se usaban antes de las telas de araña y hace que muchos tengan ahora pesadillas

Cada día que pasa, amén de la inexorable rueda del paso del tiempo, que todo aplasta y a nadie escucha, la sabiduría popular tiene más de lo primero y menos de lo segundo: los saberes de aquellos que vivieron en la tierra antes que los que hoy la ocupan guardaban una diferente relación con el entorno, cuyos entresijos conocían de mejor manera. Cuanto más se aleja el humano de ello, mayor es el olvido. Algunos perfiles de redes sociales se dedican a recopilar estos conocimientos para que las nuevas generaciones, apegadas al teléfono móvil casi de forma inevitable, se hagan eco de ellos.

Es el caso de ‘Desde Asturias’, un perfil de más de 82.000 seguidores que muestra a través de TikTok “rutas, viajes, curiosidades y gastronomía”. Y ejemplo de ello es un reciente vídeo que ha pillado desprevenida a su comunidad, completamente inundada de curiosidad. “Mar, quiero que me enseñes la importancia de las telas de arañas en las cuadras”, le dice el cámara a la protagonista de la publicación, que no tarda en meterse, a la vez que ingresa en el habitáculo de los equinos, de lleno en la cuestión: ”Uy, uy, uy. Vamos a hablar de limpieza”.

Tal y como comienza desgranando, “una de las revisiones que tenemos en las cuadras es el bienestar animal, que ya lo hemos comentado, pero también es la sanidad”, siendo en este segundo estadio donde juegan las telas de araña una importancia vital: “Para que se peguen los mosquitos. Antiguamente las esquinas estaban blancas. Qué pasa ahora: que no podemos tenerlas porque Sanidad no lo permite”. Sin embargo, y lejos de quedarse ahí, atribuye a esta tela una relevancia todavía más desconocida y, si cabe, más crucial.

Un inesperado remedio natural

“El químico que utiliza la araña para hacer la tela es muy importante y sirve para algo”, explica, acercándose a una “zona específica” de la cuadra donde ha dejado que se acumule para mostrar a cámara el polvo que se ha pegado a ella. Y ahí se encuentra el quid de la cuestión: en la capacidad adhesiva: “Antiguamente el ganadero no limpiaba las paredes porque esto es una venda natural que corta una hemorragia”.

Estas palabras han sorprendido de lleno a sus seguidores. “Es decir, tanto si se dañaba o se mancaba una persona o un animal, se cogía de las esquinas y se colocaba sobre la herida”, ha detallado. Algunos en la caja de comentarios se han quejado de manera ilógica en términos temporales de que dos siglos atrás y en plena montaña no utilizasen una venda con mayor garantía de sanidad, pero Mar, sumida en su explicación, es meridiana: “No eran sucios, tenían el botiquín en la pared”.

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