Una empresa de comida rápida amenaza con demandar a Mbappé

Hace unas fechas, Kylian Mbappé fue noticia por un tema extradeportivo asociado a su negativa de aparecer en sesiones de fotos publicitarias con su selección. El ‘7′ parisino rechazó participar con empresas que utilizan las imágenes de los futbolistas para fomentar las apuestas deportivas o la mala alimentación. “He decidido no participar en la sesión de fotos tras la negativa de la federación francesa a cambiar el acuerdo de derechos de imagen con los jugadores”, afirmó.

Por ello, Kentucky Fried Chicken, más conocido por sus siglas KFC, ha reaccionado a este ‘escándalo’ publicitario con una amenaza contra Mbappé, ya que es uno de los patrocinadores del combinado nacional francés. La compañía de comida rápida, a través de Alain Beral, uno de sus vicepresidentes, ha condenado la actitud de la estrella del PSG acerca de su rechazo por ser uno de los rostros principales de la empresa.

“Hemos pagado un precio alto. Si es necesario, haremos valer nuestros derechos”, señaló este alto ejecutivo, haciendo referencia a las consecuencias legales que pueden recibir tanto Kylian Mbappé como su selección.

La posibilidad de cosechar un acuerdo

Sin embargo, la propia empresa de comida rápida cargó con este responsable debido a sus desmedidas palabras por esta polémica. “KFC Francia lamenta las palabras que se dijeron ayer y se informaron en los medios esta mañana. Estas son opiniones personales, pero de ninguna manera reflejan la posición de la compañía. Alain Beral no habló en nombre de la empresa, sino en el contexto de una conversación privada”, expone.

Además, KFC reiteró la predisposición y la posibilidad de alcanzar un acuerdo con la FFF (Federación de Fútbol Francesa) con el objetivo de “encontrar soluciones” para ambas partes. “KFC tiene plena confianza en la capacidad de la FFF para encontrar soluciones satisfactorias para todos sus socios y jugadores, incluido Kylian Mbappé, cuyos seguidores somos de los primeros”. El máximo organismo del fútbol francés anunció que revisará el marco legal en el que señalaba la obligatoriedad de los futbolistas de participar en estas sesiones, aunque sin su aprobación.