Un espectador de ‘La Revuelta’ saca los colores a Broncano: “Me envía Pablo Motos”

De todos los atractivos y particularidades que pueden hallarse en La Revuelta, la interacción entre el público y David Broncano es el más fructífero de todos. Hay pocos formatos de talk show o similares en la televisión que otorguen tal importancia al ateneo; pero el programa de La 1, fiel a lo que ya hacía en su anterior etapa en Movistar, rompe con ello permitiendo a muchos de sus espectadores, previamente seleccionados durante el monólogo de Sergio Bezos, formar parte del dinamismo de su cotidiana emisión.

Sin embargo, cuando esto se permite, ocurre también que, en ocasiones, surgen imprevistos. Esto ha sucedido en el programa de este miércoles, cuando el presentador jienense se encontraba conversando con una tal Adela, una mujer casi octogenaria que ocupaba la bañera —el asiento especial reservado para algunos espectadores que pueden dar mayor juego— y que a la pregunta de qué le había llevado ahí respondió con una mentira: “Supongo que tener familia numerosa. Me han traído aquí mis nietos”.

Una “abuela solidaria” y un espectador inesperado

Broncano preguntó cuántos nietos tenía y Bezos deslizó que estaban todos allí, menos un tal Javi. La cámara enfocó a un grupo de muchachos que celebraron ser captados por el objetivo. “Somos muy familiares”, dijo Adela. Cuando el presentador, al ver que la mujer no soltaba más prenda acerca de sus presuntos nietos, dio un micrófono a uno de ellos para que comentase algo al respecto. “Mi abuela es muy solidaria porque su nieto soy solo yo; ellos son mis amigos”, explicó, desatando un grito de ‘tongo’ unánime por parte del grupo y provocando un gesto inequívoco de decepción en el conductor del programa.

El nieto de Adela detalló que era muy solidaria porque no todas las abuelas adoptan a los amigos de su nieto. Broncano, intrigado, preguntó a la mujer que qué le había llevado a decir que los amigos de la universidad de su nieto eran también parte de la familia. “Es que me caen todos muy bien, como si fuesen mis nietos. Tengo seis nietos de todas formas”, respondió. Pasaron el micrófono a uno de los amigos del muchacho, pero Grison, que se había fijado en otro, insistió en que se lo dieran “al pelirrojo”. Y así lo hicieron.

Según tomó la palabra dio un giro de guion final que el público, tras dos reveses inesperados, era incapaz de prever. “Yo vengo infiltrado de Pablo Motos, me envía Pablo Motos”, dijo, provocando que el público rompiera en gritos de euforia y que Broncano, por su parte, fuera incapaz de disimular una sonrisa cómplice ante el comentario. Sobre Adela tampoco tenía mucho que decir: “La he conocido hoy”.

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