Juan Muvdi, experto en psiquiatría: “La ansiedad por comer es incurable porque no existe”
El psiquiatra ha apuntado en redes sociales la importancia de encarar las causas de la ansiedad y no únicamente los síntomas evidentes.


Puede reconocer el lector esa sensación fugaz y visceral que le lleva a abrir la nevera y que le inyecta el convencimiento de que, muy probablemente, su estrés desaparecerá en el momento en el que ingiera una unidad de algún tipo de comestible. Seguramente sea también capaz de reconocer que esto se debe a una ansiedad por comer que nubla el raciocinio. Si bien habrá deducido bien en el primer escenario, debe saber que el segundo, aunque no va desencaminado, es, por definición, incorrecto.
Así lo apunta Juan Muvdi, psiquiatra de niños y adolescentes y creador de contenido que, de un tiempo a esta parte, dedica su perfil para comunicar aquello que mejor conoce —desencriptar el laberinto mental— y así poder ayudar a su comunidad. En una reciente publicación ha abordado directamente este asunto, que, reconoce, es mucho más frecuente de lo que puede uno imaginar. Y ha sido tajante: la ansiedad por comer, simple y llanamente, no existe.
“Dedícate a la causa, no al síntoma”
“No se puede resolver la ansiedad por comer porque realmente lo que tienes no es eso, sino ansiedad en general”, cuenta, revolviéndose en una definición que, aunque redundante, deja pocas dudas: “Y como tienes esa ansiedad, la estás calmando con comida; entonces por lógica, la única forma de dejar de comer por ansiedad es mejorando esa ansiedad”.
Tal y como explica el experto, puede uno emplear algunas técnicas para “disminuir esas ganas de comer”, pero, en ningún caso, deben focalizarse ahí los esfuerzos por paliar semejante ansia: “Si nos enfocamos mejor en manejar la ansiedad de una manera global, el síntoma va a desaparecer por sí solo sin tanto esfuerzo”. Lo resume todo en una máxima: “Dedícate a mejorar la causa, no el síntoma”.
En la caja de comentarios han aplaudido su consejo, mientras que él anima a sus seguidores a ver otros vídeos suyos para hallar qué técnicas, precisamente, deben llevar a cabo si desean espantar este fantasma invisible y agobiante que, entre todas las formas de manifestación, halla con frecuencia la de dicha sensación fugaz y visceral que lleva a uno a abrir la nevera.
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