Romina Belluscio, sobre su enfermedad: “La única persona que creyó en mí fue mi marido”
La modelo y presentadora argentina, mujer del exfutbolista y entrenador José María Gutiérrez ‘Guti’, reveló hace un mes sufrir la enfermedad de Lyme.
Un mes después de haber hecho público que sufre la enfermedad de Lyme desde hace aproximadamente tres años, Romina Belluscio ha concedido una entrevista en la revista ‘¡Hola!’ en la que ha hablado del diagnóstico y de cómo ha vivido todo el procedimiento. Además, no ha dudado en agradecer el apoyo de “la única persona que creyó en ella”, su marido, el exfutbolista y entrenador José María Gutiérrez ‘Guti’.
Pese a que se pasaba el día en busca de médicos que encontrasen qué era lo que le sucedía, el diagnóstico de la mayoría era “cansancio y estrés”. Algo que no concordaba con un pensamiento de “no poder respirar ni levantarse”. “Es difícil de explicar, pero es una cosa que sientes que te mueres. Y la única persona que creyó en mí fue mi marido. Me dijo: ‘Vamos a ir hasta el fin del mundo hasta que tengas un diagnóstico porque te pasa algo’. Para mí, en ese momento, fue todo”.
La reacción de Guti fue una prueba de amor en medio de tanta incertidumbre. “No sabes cómo va a reaccionar tu pareja en una situación que es desafiante para todos. Hay gente que me cuenta que ha perdido a su familia. En esos momentos, para mí, José fue todo. Yo me quito el sombrero, antes ahora y todo el tiempo. Incluso con los niños, que yo en ese momento no podía estar con ellos, fue una maravilla”, ha expresado.
El protocolo de recuperación
Tras pasar un largo proceso hasta que consiguió ponerle nombre a la enfermedad, Romina por fin tiene un tratamiento para mejorar su salud. “Cada dos meses voy a Bruselas, hacemos pruebas, volvemos y sigo otro tratamiento. Mi recuperación también se basa en el tesón, en las ganas de investigar sobre tratamientos nuevos y en las ganas de salir adelante, que me ayudan a tener fuerzas para entrenar”.
En ese afán por entrenar también le ayuda Guti. “Entreno siempre con José y eso me encanta, porque muchas veces no tengo fuerzas o no tengo ganas, pero como lo hacemos juntos me anima”, ha subrayado. “En esta enfermedad todo suma. Hay que cuidarse a nivel físico, emocional e incluso energético. Una vez que tienes todo controlado, es una forma de vida”, ha zanjado recordando que la enfermedad es crónica.