Robbie Williams, sobre sus excesos: “Estoy hecho polvo por lo que me hice en los noventa”

En escasos días Netflix acogerá otra miniserie sobre la vida de un músico. Será Robbie Williams quien pondrá cara al nuevo gran estreno de la plataforma, que recorrerá la trayectoria del artista británico desde sus inicios hasta la actualidad; dentro y fuera de los escenarios. Por este motivo se encuentra dando pinceladas de su contenido, que es, a fin de cuentas, contar pequeños fragmentos de su vida, de medio de comunicación en medio de comunicación. Y todas tienen un factor común: el cansancio mental y físico que arrastra a sus 46 años después de un tren de vida frenético.

Así lo ha reconocido a The Sun, donde también ha confesado que siente “manopausia”, que sería el equivalente masculino a la menopausia y cuyo verdadero nombre sería ‘andropausia’. “El pelo adelgaza, la testosterona ha abandonado el edificio, la serotonina ya no está y la dopamina se despidió hace tiempo. He agotado todo lo bueno natural”, ha declarado para el citado rotativo inglés.

“Me definiría como un ermitaño feliz”

Según ha relatado, también en casa se lo recuerdan. “Mi hija me dice: ‘Papá es un flojo’. No me gusta el término ‘flojo’ porque así me describían cuando era más joven”. Entonces ha quitado la anilla a la granada de la sinceridad: “la realidad es que estoy hecho polvo por lo que me hice en los noventa y parte de los 2000″.

Los excesos a los que hace referencia, que nunca han sido un secreto, aparecerán contados con detalle en el documental. Entre ellos, el sexual; tal y como ha revelado, mantuvo relaciones con más de 100 mujeres, dato que juzga “probablemente más que el tipo promedio, pero menos de lo que cabría esperar”.

A fin de cuentas, aquellos años han pesado sobre el cantante hasta el punto de que, al visionar el documental, la reacción de Williams no ha sido positiva. De hecho, ver la miniserie ha sido para el artista como observar un “traumático accidente de auto en cámara lenta... surrealista”.

En la actualidad, tras todas las tormentas de autoestima y excesos con las drogas y el alcohol, el Sol brilla de manera apacible en la vida del cantante. Fruto de su matrimonio con Ayda Field nacieron sus cuatro hijos: Teddy, Charlie, Coco y Beau. “Sé que tengo una gran vida y me siento afortunado de tener a mi familia. Ahora mismo me describiría como un ermitaño muy feliz”, culmina Williams.