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Raúl: el éxito de ‘Sueño su boca’, la canción que le ‘robó’ Bustamante y el ostracismo

El cantante alcanzó la fama con una canción que se quedó a las puertas de Eurovisión, pero paulatinamente fue cayendo en el olvido.

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Raúl, el intérprete de 'Sueño su boca'.

La historia de Raúl Fuentes Cuenca (Vitoria, 1975) puede incluirse en la larga lista de los artistas asociados al término ‘one hit wonder’, es decir, aquellos que alcanzaron un éxito abrumador con un único tema y de los que, en muchos casos, nunca más se supo. Y no es una definición que les agrade puesto que reduce a la mínima expresión lo que en muchos casos son carreras musicales relativamente longevas.

Pero lo cierto es que también puede argumentarse que hubo un momento en el que estuvieron en la cima del éxito. Y no todos pueden decir lo mismo. Es más, en algunos casos, gracias a una sola canción se han vuelto eternos. Por no hablar de sus ingresos perpetuos gracias a los royalties, es decir, un tipo de compensación económica correspondiente a la utilización por un tercero de un producto sujeto a derechos de autor, propiedad intelectual o propiedad industrial.

Hay cientos de ejemplos de este tipo de solistas o bandas en la historia de la música en las últimas décadas. Y Raúl, con ‘Sueño su boca’ podría estar perfectamente en ella. Aunque en su caso quizá no se haga justicia si solo se le reconoce el mérito por una única canción ya que ha logrado en su carrera 11 discos de Platino, uno Diamante y uno de Oro.

Este viernes Raúl ha sido uno de los invitados en el Deluxe, donde ha repasado su carrera y la cara más amarga de la industria musical. Eso sí, a sus 47 años sigue en activo, lanzando singles y ofreciendo conciertos, pero alejado del circuito mainstream que dominara a principios del nuevo siglo. “Cuando no estás en la cresta de la ola, lo echas de menos, pero te das cuenta de que no hace falta estar en la cumbre para disfrutar de la música”, aseguraba.

Y es que en el año 2000, el vitoriano participaba en ‘Eurocanción’, el concurso organizado por TVE para seleccionar al representante español para Eurovisión. Serafín Zubiri se alzaba con la gloria, pero ‘Sueño su boca’, el tema con el que concurrió Raúl, se hizo eterno y lo catapultó a la fama. Desde ese año hasta mediados de 2005, Raúl llevó un ritmo frenético, enlazando un éxito musical tras otro, publicando un disco por año. Un ritmo demoledor que le obligó a parar.

“Llevaba dos años y medios sin parar, fueron años de mucho trabajo, muchos viajes, apenas veía a la familia y amigos. Necesité mirar hacia atrás y ver lo que había pasado. No te das cuenta de lo que significaba ser número uno y me pregunté ‘vale, he conseguido todo esto, pero ¿a qué precio?”, compartía el artista.

Sobre su paulatina desaparición de la escena musical, el cantante lo tiene claro: su discográfica dejó de creer en él. “Acabé en Universal. Al entrar en una multinacional pasas de cabeza de ratón a cola de león. Esto significa que por muy grande que sea la discográfica en la que estás, tienes a 50-60 artistas como mínimo dentro del plante. Me lo dio todo en su momento y luego se desmarcó un poco. Nunca me sentí desplazado, pero no me sentí lo suficientemente valorado como para que seempujara mi carrera”, zanjaba el cantante, que desveló un dato desconocido: David Bustamante le ‘quitó’ una canción.

“En un momento dado había seleccionado un repertorio para un nuevo álbum, pero, por diferentes movidas con el productor y la discográfica, se acabó el presupuesto sin grabar mi canción favorita. Me enfadé, pero me lo tuve que comer”, desvelaba Raúl. Meses después le confirmaron que sería Bustamante quien finalmente la interpretara, aunque “él no tuvo nada que ver”.

“La canción era ‘Cobarde’. Un temazo, y de hecho, Bustamante la hizo brutal. Igual si la hubiera cantado yo no hubiese sido un ‘hit’. Nunca lo sabremos”, zanjaba Raúl que a pesar de todo no se considera un juguete roto. “Se refiere a alguien a quien utilizan y se deshecha y ya no puede volver a dedicarse a ello”, explicaba Raúl, que no considera que ese sea su caso porque sigue “disfrutando” de la profesión, aunque lejos del foco mediático.