Qué es el ‘Plakks’, el fútbol mesa al que juega la Selección española olímpica de fútbol
Antes, otros futbolistas como Leo Messi, Antoine Griezmann o Marc Cucurella publicaron en sus redes sociales este juego que ya se ha convertido en referente para el entretenimiento de los deportistas.
Nació con la idea de potenciar las relaciones personales y evitar el excesivo uso de las pantallas que cada vez predomina más en la sociedad, pero terminó siendo un juego de mesa referencia para personalidades de la talla de Leo Messi, Rodrigo De Paul, Antoine Griezmann o la Selección española olímpica de fútbol. Hablamos del ‘Plakks’, una especie de fútbol mesa creado por Haritz Múgica y por Jordi Domínguez.
Aunque el proyecto lleva ya años asentado en el mercado, ‘Plakks’ vuelve a estar de moda por un vídeo de la Selección española masculina de fútbol en el que varios de sus jugadores aparecen jugando. La pieza, que muestra cómo la expedición nacional se desplazaba hasta Marsella para disputar las semifinales del torneo olímpico contra Marruecos, enseña a Arnau Tenas y a Marc Pubill disfrutando del juego.
Otros futbolistas, como Griezmann, Messi y Rodrigo de Paul -estos dos últimos durante el Mundial de Qatar- también han compartido en sus redes sociales algunas imágenes disfrutando del juego. “Nuestra manera de llegar a estos futbolistas siempre fue sin recursos económicos, simplemente escribiéndoles por Instagram y a los que contestaban les enviamos el juego. Y con esto se acabó produciendo el efecto bola de nieve, hasta conseguir que centenares de ellos publicaran en sus redes sociales sus partidas”, explica Múgica. Cucurella, incluso, fue un paso más utilizando ‘Plakks’ para estudiar táctica en sus ratos libres durante la pandemia.
Cartas como novedad de un juego sostenible
La mecánica del juego, de una duración aproximada de entre cinco y quince minutos, es sencilla. Básicamente funciona de un modo parecido al de las chapas, aunque se introduce la existencia de cartas con variables, como la posibilidad de que un gol valga doble, la recuperación de un jugador o la opción de mover el portero. Con cada gol se elimina uno de los siete futbolistas que tiene el equipo.
En su página web tienen instalado un contador de las horas en las que se han evitado las pantallas gracias a su juego: un total de 168.240, lo que supondrían 7010 días y más de 19 años entre todos los compradores. Además de manufacturar el juego con materiales sostenibles, Jordi y Haritz plantan un árbol por cada cliente que tienen.
“Pensamos en el planeta como el hogar para nuestras futuras generaciones, y por eso debemos cuidarlo. Aparte de fabricar juegos de madera, que son más duraderos y sostenibles que los de plástico, buscamos maneras de reducir nuestro impacto en el planeta”, cuentan para explicar una iniciativa que les diferencia y les hace sentir orgullosos.
Además de la versión futbolística, que se puede adquirir por 49,95 euros, existen otros tres juegos de mesa diferentes. Uno es como el fútbol, aunque en dimensiones reducidas para viajes; otro contiene circuitos de golf y un último dedicado a deportes olímpicos.