Pablo Carbonell, de consumir “de todo” a no tomarse ni una cerveza

“He sido un drogadicto, me he puesto de todo”. Esta confesión de Pablo Carbonell hace menos de un año en ‘Fran y amigos’, la sección que el torero Francisco Rivera tenía en ‘Espejo Público’, ponía encima de la mesa una problemática que lamentablemente destroza la vida de muchas personas y familias. “Se pierde mucho tiempo con la droga”, añadía el actor, humorista, cantante y escritor, que afortunadamente dejó atrás aquella época de excesos.

“Ahora camino mucho por la sierra, no bebo alcohol desde el confinamiento, ni siquiera una cerveza, por eso me vino bien el confinamiento”, asegura el polifacético artista en una entrevista con Diez Minutos, que no teme el paso del tiempo tras convertirse en un sexagenario.

“Lo llevo muy bien, me parece mejor cumplirlos que no hacerlo. Quiero compartir con quienes les pueda atemorizar cumplir 60, que yo cuando me hago una foto y la veo, pienso que efectivamente tengo esa edad, pero por dentro me siento un crío”, señala Carbonell, aunque sí hay algo que le da pavor.

“La enfermedad, ser un lastre para mi familia. Espero que cuando esté en el último tramo, la eutanasia ya esté normalizada”, comparte sin dudarlo.

La nueva droga

Como superviviente de una época de excesos y como padre, Pablo Carbonell sí pone el acento en el fenómeno de las redes sociales, que para muchos niños y jóvenes es un verdadero problema. “Esa es la primera droga que toman los niños. El enganche a la pérdida de realidad a la que someten las redes es brutal, porque consiguen que los jóvenes nunca estén satisfechos con su vida, por eso necesitan evadirse y cuando esa evasión la pueden conseguir fácilmente, adiós muy buenas”, zanja Carbonell, que publicó a finales de 2021 su último libro, ‘El nombre de los tontos está escrito en todas partes’.