Los vecinos del barrio de Ventilla denuncian al restaurante de Dani García

Multitud de grandes cocineros han dado el paso a la creación de las famosas cocinas fantasma o dark kitchen, que se trata de cocinas ubicadas en pequeños locales donde formulan recetas de grandes restaurantes para pedidos a domicilio. Una técnica que empezó a ser más utilizada a raíz de la pandemia del coronavirus ante la imposibilidad de desplazarse o el miedo a reunirse en espacios cerrados con multitudes.

Esto lo han utilizado estrellas del mundo de la gastronomía como Dabiz Muñoz con GoXo, y Dani García con La Gran Familia Mediterránea. Sin embargo, esta técnica no ha terminado por contentar a todos, y es que éste último se ha visto envuelto en una polémica por una de sus cocinas fantasma ubicadas en el barrio madrileño de Ventilla, en el distrito de Tetuán.

Ruidos y olores constantes

Allí, los vecinos están descontentos con la situación que están viviendo en la actualidad debido a los ruidos y los olores que desprende este local que utiliza el famoso chef para llevar a las casas de sus clientes sus productos. Una situación que han expuesto a través de un hilo en un perfil creado en Twitter, donde han recogido las prácticas que se llevan a cabo en este lugar. “No puedes abrir las ventanas porque tienes los ruidos y olores. Los tendederos los tenemos en la parte donde tienen las salidas de los extractores, por lo que debes tener mucho cuidado”, ha denunciado una fuente a ‘Madridiario’.

De hecho, los propios vecinos del barrio han creado un perfil en Twitter donde detallan lo que ocurre en sus viviendas en estos momentos. “Llegas a casa pensando en abrir la ventana y refrescarla después del día de calor de agosto. Pero no puedes por el olor nauseabundo a fritanga de Dani García”, han escrito en un tuit.

No ha sido el único, pues no son solo los olores de lo que se quejan estos vecinos, sino también del ruido que generan estas cocinas durante todo el día, y es que poseen unos largos conductos por donde se expulsa un aire caliente que sube la temperatura varios grados y que contiene un “olor a fritanga” y que definen como “la turbina de un avión” por el ruido que genera.

A estos problemas también se les suma el del ruido que generan los riders por las motos y la manera de aparcar: “A finales de junio pusieron un cartel en la puerta para los riders diciendo que las motos las tenían que aparcar dentro, pero es un local pequeño, por lo que aparcan fuera, e incluso se meten por dirección prohibida”, ha señalado otro vecino al citado medio.

“Hay más de 20 reclamaciones presentadas. El año pasado vino la Agencia de Medio Ambiente enseguida porque había tantas quejas a la vez que les llamó la atención y ahora, sin embargo, no vienen. Les paralizaron la actividad y la han vuelto a abrir pasados unos meses sin licencia todavía y la Agencia de Actividades sigue sin pronunciarse”, critica otra vecina.

Una situación que no han dudado en comentar a las autoridades, incluidos el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, siendo mencionados en sus mensajes compartidos en sus redes sociales.