La reacción de Mercedes Milá contra el jurado de ‘MasterChef’ que el programa censuró

Uno de los grandes rostros de la televisión española, Mercedes Milá, fue la invitada a la prueba de eliminación del programa especial de Navidad de MasterChef. La presentadora, que siempre ha destacado por su claridad y rotundidad delante de las cámaras, volvió a dejar una muestra de las características que la definen al reaccionar contra el jurado después de que estos criticasen el trabajo de algunos concursantes.

Después de admitir que Macarena Rey, la CEO de Shine Iberia (la productora del formato), se había puesto en contacto con ella para intentar que formase parte de alguna de las ediciones del concurso, Mercedes se convirtió en el foco de atención. Tanto que los jueces insistieron en convencerla para que participase en otra ocasión.

“No puede ser. Yo no sé hacer esto”, expresó en una conversación con Samantha. La súplica de Pepe fue más allá, pues llegó a poner en duda que Mercedes fuese a ser capaz de rebatirles los veredictos. “Depende de si os portáis bien o no”, contestó la periodista. Una respuesta que pudo demostrar cuando los jueces valoraron los platos de Mario Vaquerizo, ‘La Terremoto’ de Alcorcón, Florentino Fernández y Boris Izaguirre.

“Boris es amigo mío y lo estáis machacando”

Especialmente críticos fueron con los dos televisivos. El plato que había cocinado Boris Izaguirre no fue del gusto de los examinadores y, por ende, recibió su reprimenda. Tanto que Mercedes Milá no dudó en responderles: “Oye, basta ya eh. Ya está bien, porque Boris es amigo mío y lo estáis machacando. Me voy”, afirmó. “El duro trabajo de ser jurado de MasterChef es que decimos la verdad”, le replicó Jordi en un mensaje que no cambió la opinión de la catalana: “Me da lo mismo lo que haga porque lo que haga será extraordinario porque él es así”, zanjó.

Las críticas no cesaron, puesto que después fue el turno de valorar el plato de Florentino Fernández. A su receta le faltaban también gran parte de las elaboraciones, por lo que la evaluación fue parecida a la que habían mostrado antes a Boris. “Son malísimos. Si me da una locura a mí y termino viniendo aquí, ¿a mí me van a tratar así?”, cuestionó Mercedes.

Sin embargo, no se quedó ahí la presentadora, que incluso amenazó en tono de broma a los conductores del programa. “Porque a la primera patada en la boca te doy yo en otro sitio. Llevo fatal el cachondeo de un juez, me parece inmoral. ¿Cómo puedes tratar a un pobre chico que ha estado ahí dejándose las uñas de los pies?” prosiguió antes de autoconvencerse que MasterChef no era su programa. “Yo no vengo. Soy compasiva. Vosotros sois unos hijos de …”, zanjó mientras la producción tapaba su última palabra con el villancico Campana sobre campana.

La magia de la televisión, como casi siempre, hizo el resto. Y es que los comentarios de la presentadora, aunque parecían ser en serio, no eran en un tono enfadado puesto que al terminar su aparición en el programa se despidió con abrazos de los jueces.