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La experiencia “cercana a la muerte” de Orlando Bloom

El actor y Embajador de Buena Voluntad de UNICEF ha participado en una campaña sobre salud mental en la que narra una época “bastante oscura” de su vida.

Orlando Bloom se sumó al movimiento Time's Up con traje, corbata y camisa negras.

Romper el estigma en torno a la salud mental es fundamental para evitar la exclusión sobre todo cuando hablamos de niños, niñas y adolescentes con algún tipo de malestar emocional o problema de salud mental. Con motivo del Día Mundial de la Salud Mental, que se celebró el pasado 10 de octubre, son varios los testimonios de famosos que tratan de visibilizar el problema para tratar de normalizarlo.

Tal es el caso de Orlando Bloom, el actor británico que saltó a la fama gracias a El señor de los anillos, que ha compartido una experiencia “cercana a la muerte” y que a la postre le hizo sumirse en una época “bastante oscura”.

Cuando tenía 19 años me caí de una ventana desde el tercer piso y me rompí la espalda. Tuve mucha suerte de sobrevivir y mi médula espinal seguía intacta. Durante los primeros cuatro días me dijeron que tal vez no volvería a caminar”, narra el actor en un vídeo compartido por UNICEF.

“Ese fue el comienzo de un largo y doloroso viaje para mí que me llevó a reconocer y comprender algunos de los patrones que habían estado en mi vida y que me habían llevado a tener numerosos accidentes. Y la culminación fue romperme la espalda, que fue una experiencia cercana a la muerte”, añade Bloom.

“Diría que los meses posteriores a la caída fueron una época bastante oscura. Como alguien que siempre había sido muy activo en mi vida, me sentí muy restringido de repente y tuve mucho dolor”, señala el intérprete, que también formó parte del elenco de Piratas del Caribe.

“La lesión me dio espacio y tiempo para reflexionar. La salud mental es particularmente desafiante porque es invisible. Pero siempre hay una oportunidad para transformar el dolor, ya sea físico o mental, en la gran fortuna de tu vida. Es muy importante acercarnos a otras personas, hablar con la gente, encontrar a alguien con el que crear una vía de comunicación que nos lleve a la transformación y al cambio. Todo empieza con un momento, con una conversación, con una pregunta: ¿Qué pasa por tu mente?”, concluye el Embajador de Buena Voluntad del organismo internacional.