La crisis de Ucrania afecta al Manchester United
El club inglés tuvo que variar su plan de vuelo para disputar el choque de ida de los octavos de final de la Champions League frente al Atlético de Madrid.
La situación generada por Vladimir Putin tras reconocer las autoproclamadas repúblicas separatistas ucranianas de Donestk y Lugansk y enviar tropas a la zona, ha provocado en las últimas horas una cascada de condenas y sanciones a cargo de buena parte de la comunidad internacional que no tienen otra finalidad que incrementar la presión sobre el líder ruso para evitar un conflicto armado.
En cualquier caso, los daños colaterales de la ‘ofensiva’ rusa también está obligando a otros organismos e instituciones a replantearse la situación. Y tal es el caso del Manchester United, que este martes tuvo que variar su plan de vuelo con destino a Madrid para enfrentarse al Atlético a partir de las 21 horas en la ida de los octavos de final de la Champions League.
El origen del problema radica en que el Manchester United normalmente se desplaza para sus partidos internacionales fuera de casa con la aerolínea rusa ‘Aeroflot’, que figura como partner oficial del club y lleva vinculada a la entidad desde hace años.
Este martes, el equipo de Cristiano Ronaldo, debía despegar a las 16:00 horas en el vuelo A359 hacia Madrid, pero el vuelo fue cancelado. La decisión del United se tomó después de que la crisis en la frontera con Ucrania se intensificara y las tropas rusas invadieran el país, y de “mutuo acuerdo” con la compañía, aunque de momento no peligra el acuerdo entre ambas instituciones.
Finalmente, el Manchester United tuvo que buscar una alternativa y decidió fletar un vuelo chárter de la aerolínea británica Titan Airways para llegar con cierta holgura a Madrid para disputar el trascendental choque de este miércoles.
Final de la Champions League en Rusia
El primer ministro británico, Boris Johnson anunció este martes sanciones contra Rusia y de cara a la final de la Champions League, que en principio debe disputarse el 28 de mayo en San Petersburgo, Johnson también aseguró que era “impensable” seguir disputándola en una Rusia “que está invadiendo otros países”.