Un dermatólogo da la clave sobre las cremas hidratantes en España y sentencia: “Hay cosas más efectivas”

El paso de los años es inexorable y universal porque del tiempo nadie se libra; lo que sí se puede es convivir con el sonido que emiten las manecillas del reloj. A nadie sorprende que las arrugas aparecen cuando uno alcanza cierta edad, pero lo cierto es que no hace falta arrancar tantas hojas del calendario para acusar diversos cambios en la piel que, como es evidente, no tienen por qué ser buenos. Así lo indica Alex Docampo, un creador de contenido y profesional dermatólogo que acumula 175.000 seguidores en TikTok y que dedica sus vídeos a desmontar todos los mitos que rodean el cuidado de la piel en España.

Uno de ellos es el de las cremas hidratantes: de este producto se ha hablado tanto y de tantas formas diferentes que cuesta reconocer cuáles son sus verdaderas propiedades. A estos efectos, Docampo explica que, en realidad, depende de otros factores que en muchas ocasiones no se tienen en cuenta. Uno de ellos, la distinción de la parte cuerpo donde se aplique. “La verdad es que la piel del cuerpo y la de la cara son muy diferentes”, inicia su lección digital de dermatología.

Según explica el profesional médico, “en la cara tenemos muchas glándulas sebáceas y esto es mucho menos habitual en la piel del cuerpo”. Pero no queda ahí. “Además, la piel del cuerpo tiende a secarse mucho más, sobre todo cuando está expuesta a agresores externos como el frío o el viento”, relata, añadiendo que, por otro lado, “hay muchas personas que tienen dermatitis atópica, que muy frecuentemente afecta a piernas o brazos, pero es muy raro que llegue a afectar a la cara”. Precisamente en este último caso sí que resulta crucial emplear “una crema hidratante cuando la piel está bien”, ya que “es importante para evitar que esta se deshidrate, que pierda agua y además protegerla de los factores externos, que es lo que con el tiempo puede llevar a que aparezcan eccemas”.

Respecto al paso del tiempo, vacila: “Eso sí, ni en la cara ni en el cuerpo el utilizar una crema hidratante va a evitar la aparición de arrugas a largo plazo”. El asunto es que, tal y como ha explicado en otras ocasiones, el uso de estos productos “no quita las arrugas, sólo mejoran transitoriamente su apariencia”.

Si de verdad quieren combatirse, revela, “hay otras cosas mucho más efectivas”, como “la protección solar, que puede prevenirlas, y el retinol, que genera colágeno y elastina en la dermis”. No obstante, y consciente de lo inexorable del paso del tiempo, advierte: “¡Ojo, que tampoco hace milagros!”.

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