Ignacio Sevilla, experto en cirugía capilar, revela cuándo deberíamos preocuparnos por la caída del pelo: “Es el factor más fuerte”
El director médico de la clínica especialista Svenson explica para AS cuáles son las causas más comunes de pérdida y si se puede revertir.
La caída del pelo es un problema que afecta a millones de personas en todo el mundo, independientemente de la edad o el género. Aunque es un proceso natural que forma parte del ciclo de renovación capilar, cuando la caída se vuelve excesiva puede generar una gran preocupación y afectar la autoestima de quienes la padecen.
En una charla con AS, el médico Ignacio Sevilla explica que una pérdida normal se considera aquella de entre 50 y 100 cabellos por día. Sin embargo, deberíamos empezar a preocuparnos en caso de que se esté “produciendo, de forma mantenida, una caída superior, si se observan zonas de menor densidad o clareos visibles, o placas claramente alopécicas, y en caso de que la caída se acompañe de síntomas como picor o sensación de dolor en el cuero cabelludo o signos como rojez de este”.
“En los hombres, la causa más frecuente de la caída es la alopecia androgenética, aunque también puede deberse a deficiencias nutricionales, estrés o a enfermedades autoinmunes (lo cual puede originar una caída reversible pero también en ocasiones puede ser irreversible)”, explica el experto en cirugía capilar de la clínica. “En las mujeres las causas están más repartidas que en los hombres y también hay caídas con más de una. Al igual que en los hombres, también puede deberse a una alopecia androgenética (aunque con menor frecuencia que en el caso de los varones). Otras causas podrían ser efluvio telógeno (secundario al estrés o al posparto o a alguna enfermedad), alteraciones tiroideas, déficit de hierro o vitamina D”, agrega.
Revertir la caída
De acuerdo con Sevilla, en algunos casos sí es posible revertir la caída capilar: “Todo depende de la causa del proceso. En el efluvio telógeno, sí, suele revertirse al corregir la causa. En el caso de la alopecia androgenética, no se revierte totalmente, pero sí se puede frenar y mejorar con tratamiento precoz. Es la que mejor responde al microinjerto”.
Sobre la caída del pelo en otoño, el médico explica que no se trata de un mito: “Estudios en dermatología han observado un aumento de telógenos en otoño. Aunque no está clara la causa, parece que puede tener relación con un mecanismo de renovación tras la exposición a sustancias como pueden ser el cloro de las piscinas o sal del agua del mar, y el aumento de la exposición solar durante el verano. Otra causa que podría justificarlo serían los cambios en el ritmo circadiano por reducción en el número horas de luz durante el otoño, incluso se ha postulado que podría tratarse de una reminiscencia de la muda que tiene lugar en los mamíferos”.
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“La caída estacional o efluvio telógeno estacional es una caída difusa del cabello que se debe a que un porcentaje alto de folículos entra de forma simultánea en la fase de caída (fase telógena), esto ocurre fundamentalmente en otoño y primavera, sin embargo, no se trata de una caída definitiva, la mayor parte de los folículos volverán a crecer. Cuando la causa de la caída es patológica no existe predominio estacional, sino que es progresiva, se localiza en ciertas áreas de la cabeza (entradas, coronilla…) y se asocia a enfermedades, disbalances hormonales, procesos autoinmunes o predisposición genética”, añade.
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