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Elena Jiménez, de ‘Club Disney’ a sargento del Ejército del Aire
La mítica presentadora del espacio infantil de Telecinco durante la década de los noventa reaparece en ‘Socialité’ hablando de su nueva vida alejada de los focos.
‘Club Disney’ se convirtió durante la década de los noventa y comienzos de los dos mil en el espacio infantil de referencia en televisión. Jordi Cruz, Vanessa Martyn, Jimmy Castro y Elena Jiménez fueron algunos de sus jóvenes presentadores que lograron conquistar a la audiencia de Telecinco. Más de veinte años después, Elena Jiménez reaparece en el programa ‘Socialité’ donde sorprende a todos hablando de su nueva vida lejos de la pequeña pantalla y de los focos.
La mítica presentadora, de 37 años, es ahora sargento del Ejército del Aire, actriz de doblaje y tiene un hijo. “Cuando dejé de trabajar en televisión dije: ‘me meto en el ejército, creo que es el momento’. Y sí, es la mejor decisión tomada de mi vida”, comienza diciendo frente a los micrófonos del programa de los fines de semana de Mediaset. “Soy sargento primero. Hace dieciséis años que entré en el ejército. Había gente que se creía que había entrado para preparar un personaje. Y yo decía: ‘Pues mira, no… Estoy aquí para ser soldado como tú’”, continúa relatando entre risas.
“Siempre lo tuve claro. En las ferias era la niña que pedía escopetas. No volvería a la televisión, creo que se me ha pasado ese momento”, dice. Elena Jiménez vive una vida muy feliz lejos del foco mediático y no cambiaría esta situación por nada del mundo. “Donde estoy es donde quiero estar y cómo se que lo puedo compaginar con el doblaje, sigo haciendo temas de interpretación, pero sin dar la cara”, afirma.
La fama siendo adolescente
Sobre el peso de la fama siendo tan joven, Elena Jiménez asegura que no le gustaría volver a eso. “Llevaría regulero que me reconocieran por la calle como antes”, sostiene. “A mí esa época me pilló adolescente. El tema bullying lo lidié bastante bien. Fue durillo. Te pinchaban, te decían: ‘eres la de la televisión, eres una chulita’. Por suerte siempre he sido muy pasota”, dice. “Ahora me paran muy poco por la calle. Te lleva a pensar si has cambiado mucho o que la gente ya, evidentemente, se ha ido olvidando porque han pasado muchos años”, concluye.