El testimonio de la víctima de Alves a un agente tras la presunta agresión: “Nadie me creerá”
‘El programa de Ana Rosa’ ha mostrado en exclusiva cuáles fueron las primeras palabras de la joven a un mosso d’esquadra tras los hechos.
El caso Alves atraviesa la recta final de su instrucción. El futbolista permanece en prisión preventiva en el centro penitenciario de Brians 2 desde el pasado 20 de enero, habiendo pasado ya más de 100 días entre rejas. Todo ello por una denuncia de una joven de 23 años que asegura que le agredió sexualmente en el lavabo de un reservado de la discoteca Sutton de Barcelona el pasado 30 de diciembre.
Una presunta agresión que están analizando minuciosamente, y sobre la que la víctima vertió una declaración en su momento que no ha cambiado en ningún momento, a diferencia de las versiones varias que ha dado Alves desde que el caso vio la luz.
Este jueves, ‘El programa de Ana Rosa’, después de sacar el auto de la jueza en el que rechazaba la petición de la defensa del jugador de sacarle de prisión, ha mostrado en exclusiva las declaraciones que dio la víctima de Alves entre lágrimas a uno de los mossos d’esquadra momentos después de que se produjese la presunta agresión sexual.
Las primeras declaraciones de la joven
Una confesión que fue grabada y en la que la joven de 23 años no dejó de llorar, tal y como capta la cámara que porta el agente que le atiende. “Accedí de manera voluntaria al lavabo y después de darnos unos besos le dije que me quería marchar... pero él me dice que ‘no’ y cierra el pestillo”, comenzaba señalando la víctima.
Y es que mientras la joven permanecía derrumbada ante el agente, fue relatando poco a poco cada una de las cosas que supuestamente le ocurrieron: “Me comenzó a decir cosas desagradables como ‘eres mi putita’ y también me empezó a pegar. Me tiró el bolso al suelo y me cogió de la ropa...”. Un momento en el que la joven se rompió de nuevo y que siguió su amiga, confirmando al agente que “ha habido penetración”.
Después, el agente llamó a una ambulancia, donde le trataron y puso la denuncia. Ahí la joven confesó entre lágrimas que “nadie me creerá porque verán por las cámaras que entré de manera voluntaria al lavabo”.