MÚSICA
El nuevo negocio de Aitana totalmente alejado de la música
La cantante ha creado una empresa, según ‘Vanitatis’, para la promoción inmobiliaria con un capital social de más de 600.000 euros.
Aitana Ocaña continúa imparable. Después de triunfar en la música, la catalana dio el salto a las series con Disney+ y posteriormente al cine de la mano de Netflix, pero ahora se ha conocido el nuevo negocio en el que se ha embarcado invirtiendo una importante suma de dinero. La joven, explotando su faceta de empresaria, ha creado una nueva empresa para adentrarse en el mundo del ladrillo apostando fuerte en el mercado inmobiliario.
Tal y como publica este martes el portal Vanitatis, Aitana dio de alta el pasado mes de abril la sociedad Sop y Oli SL, en honor a los nombres de sus mascotas, una empresa que tiene como actividad la promoción inmobiliaria y en la que la artista es administradora única. El mismo medio asegura que el capital social de la compañía es de más de 600.000 euros, pero por el momento, con apenas un mes de actividad, no figura ninguna propiedad a su nombre.
Aitana sí cuenta a título propio con una vivienda que compró en 2021 y en la que supuestamente vive ya con su pareja, Miguel Bernardeau. Se trata de un chalé en Dehesa de la Villa, muy cerca de donde vive la familia del actor, de más de 270 metros cuadrados repartidos en tres pisos y que ella misma decidió reformar antes de entrar a vivir.
La catalana, siguiendo la información que aporta el mismo medio, habría decidido aprovechar su excelente momento profesional para invertir parte de las ganancias, aunque por el momento no se tiene constancia si se decantará por viviendas para alquiler, casas antiguas para reformar, áticos o solares en los que construir. Las opciones en el sector son muy amplias y Aitana quiere aprovechar al máximo su tiempo y su dinero también fuera de los escenarios.
Una marca que vale oro
Aitana Ocaña ha creado una marca durante sus cinco años en la fama que vale mucho dinero. Nada más salir de la academia de Operación Triunfo se convirtió en imagen de Stradivarius, posteriormente con Puma, McDonalds, Orbit, Coca-Cola, GHD, Rimmel London e Yves Saint Laurent. Una mina de oro a la que, evidentemente, habría que sumar todos los ingresos que ha conseguido con sus éxitos en la industria musical.