El nuevo look de Harry Styles: de la melena a un rapado a cero

Si bien la trayectoria de Harry Styles ha permanecido en el primer plano musical desde hace más de una década, amén de su precoz éxito de la mano de la extinta y mítica banda One Direction, el impulso que ha experimentado su carrera como artista en solitario durante los últimos años ha sido magníficamente fulgurante. En cifras: son más de 55 millones de oyentes los que reproducen su música cada mes en Spotify.

El interés por su vida personal ha experimentado un crecimiento similar y proporcional al joven triunfo de su música. Siendo esta la situación, el artista decide mantener un perfil bajo y discreto. Ejemplo de ello ha sido su relación con la actriz canadiense Taylor Russell; pese a que la noticia ha trascendido por todos lados y desde hace meses, todavía no ha confirmado nada, guardando las distancias, para no dejar que permee su vida en la opinión pública. Lo que no ha podido evitar ocultar ha sido su radical cambio de look: se ha rapado la cabeza a cero.

Donde antes hubiera una sólida y desaliñada melena ahora no se avista un pelo. El cantante se ha mostrado con su nuevo look durante un concierto que la banda de rock U2 dio en Las Vegas Sphere; evento al que acudió en compañía de Russell. Allí le captaron las cámaras de seguidores y curiosos. El rumor de su tajante decisión estilística se confirmó en el momento en el que TMZ difundió unas fotografías que no daban lugar a duda.

Aluvión de reacciones

Las redes no han tardado en reaccionar. Y lo han hecho de mil formas diferentes, muchas con el ingenio que caracteriza a las redes sociales cuando de desatar la burla se trata. “Ha querido ser Britney, pero mal”, decía un usuario, haciendo referencia a la similar decisión que tomó la artista norteamericana en 2007; otro internauta completaba la broma, aludiendo a uno de sus excompañeros en la boy band: “ha querido ser Zayn, pero mal”.

Los hay más directos. “Pensaba que era falso, ¿pero qué se ha hecho?”, se pregunta uno. Y crece un veredicto generalizado que cataloga su corte como ‘lo peor’ que podía hacer, casi como si de quitar el tronco maestro de una presa se tratase. “Hermano, ha perdido el aura que tenía”, viene a decir otro; redondea este pensamiento otro perfil, que en un ejercicio retórico se cuestiona lo que muchos de sus seguidores no cesan de plantearse: “¿por qué se ha quitado lo único que daba sentido a su look?”.