El infierno de Liam Neeson por sus problemas físicos: “El dolor me hizo llorar”
El actor ha tenido que lidiar con fuertes dolores y calambres que le hacían incluso llorar a causa del exceso de café.
Liam Neeson es ya uno de los actores más reputados de Hollywood gracias a sus variados papeles en películas, acumulando así un total de 142 entre series y películas, y destacando algunos títulos como ‘La lista de Schindler’, ‘Los miserables’ y ‘Venganza’, entre otros.
Pero, no todo ha sido bueno en la vida del irlandés, y es que en su vida privada ha tenido que hacer frente a varias situaciones delicadas, como la muerte de la que fuera su mujer, Natasha, en el año 2009, tras un grave accidente. Físicamente tampoco es lo que era, y es que en los últimos tiempos también ha lidiado con algunos problemas, tal y como ha confesado ahora en una entrevista concedida a la cadena británica ‘Radio 5′.
Dolores fuertes y calambres
El actor ha hablado acerca del infierno que ha tenido que pasar debido a sus problemas físicos, los cuales le impedían dormir. “Tenía pequeños dolores en la pierna y calambres en mitad de la noche”, ha comenzado diciendo, asegurando después que se fueron agravando y se convirtió en crónico.
Fue entonces cuando se encomendó a un amigo suyo, quien le preparó una cita con un terapeuta: “Un amigo mío me preparó una cita con un terapeuta que emplea masajes en bailarines de Broadway. El dolor me hizo llorar, fue una agonía cuando se deshizo de los cristales de ácido láctico en mi pierna”.
Sin embargo, la cosa no funcionó, y es que los problemas seguían ahí, siendo incapaz de utilizar algunos músculos que estaban afectados por los calambres nocturnos. Un problema que le ha lastrado tanto en proyectos profesionales como en su vida diaria. De hecho, estos problemas solían asociarse al exceso de ejercicio y la deshidratación, algo que podía deberse a su cambio de registros en los últimos años, pasándose a la acción de la mano de ‘Venganza’, convirtiéndose en un actor más físico pese a que los años iban pesando más y más.
Pero, Liam Neeson consiguió dar con la solución. Fue mientras hablaba con su terapeuta, a quien confesó que bebía una gran cantidad de café. “Me dijo que el problema podía rebajarse si cambiaba al descafeinado. Y los calambres han desaparecido en un 90%”, ha concluido, señalando que ya no sufre los mismos dolores que antes.