El agua mineral de Cristiano Ronaldo levanta sospechas de falsedad

En una de las últimas visitas -si no la última- que Cristiano Ronaldo hizo a España, el astro portugués presentó públicamente su negocio más reciente. El futbolista del Al Nassr FC ha apadrinado el negocio de las aguas minerales erigiéndose al mando de URSU, una empresa que tiene su epicentro en las Aguas Mineras de Ávila, ubicada en la laguna de El Oso.

Definida como “mucho más que agua”, los trabajadores de la empresa aseguran que con la bebida “pretenden mejorar la calidad de vida de la población en general”. De origen alcalino por su procedencia del suelo y de las rocas porosas, en su web aseguran que gracias a este punto de partida el producto está protegido de “agresiones externas, garantizando características estables y permanentes y sin sufrir contaminación humana y química”.

Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. Desde El Comidista, la web especializada en gastronomía de El País, advierten de la existencia de una gran cantidad de mentiras detrás del negocio con URSU9. Por ejemplo, destacan que no hay evidencias de que las aguas alcalinas sean mejores que las otras y que todos los estudios científicos que existen al respecto son “de gama baja o cuando menos dudosa”.

Para más inri, no existen ninguna referencia en forma de permiso al agua alcalina en el reglamento RE 432/2012, el que supuestamente determina qué se puede decir o no en el ámbito de la salud alimenticia. Y, por supuesto, tampoco dice nada de agua antioxidante porque su poder en cuanto a esta característica es tan inexistente que se suele utilizar como elemento de control en todas las investigaciones para medir capacidades antioxidantes en otros productos.

Invenciones varias

La campaña de promoción de la compañía mostraba imágenes de un manantial de agua que se supone que se corresponde con El Oso. Tan solo una breve comprobación en Google Maps permite comprobar que, nada más lejos de la realidad, el pueblo no tiene nada que ver con la publicidad de URSU9. La lectura selectiva de los comentarios en la publicación de Instagram de la empresa sería útil para alcanzar la misma conclusión.

La cascada que aparece, tal y como insiste El Comidista, se corresponde con un paraje de la Serra do Açor. La Cascata da Fraga da Pena está en el municipio de Arganil y no tiene nada que ver, en principio, con las promesas que la firma de agua de Cristiano Ronaldo contrae con sus consumidores.

Si los vídeos ya son de por sí mentira, la historia que rodea al lugar del que consiguen el agua tampoco tienen mucho de ciertas. Según su versión, la localidad abulense debe su nombre a la visita de osos a beber en sus aguas. No obstante, especialistas en la zona y miembros del ayuntamiento niegan la mayor y afirman que se debe a una derivación de lutosus, traducido como ‘barroso’.

La última de las mentiras que expone El Comidista procede de un análisis pormenorizado del pH del agua de las botellas. Pese a que la firma asegura que es de 9, el mayor dato alcanzado en la medición es de 8,62, lo que significa que tiene tres o cuatro veces menos que el anunciado. Aunque, volviendo a la explicación inicial, la modificación es totalmente irrelevante para el organismo.