Carla Vigo, sobrina de la reina Letizia, cuenta la verdad sobre la muerte de su madre
La joven se ha sincerado sobre uno de los momentos más difíciles de su vida, cuando perdió la vida Érika Ortiz, así como sobre sus problemas de salud.
Carla Vigo, sobrina de la reina Letizia, ha dado una sincera entrevista a la revista Lecturas donde ha hablado sobre cómo vivió la muerte de su madre, en 2007, cuando apenas tenía 6 años.
“He tenido sentimiento de culpa, pero no por tener el sentimiento de abandono. ¿Con 6 años qué iba a hacer? Me di cuenta de que mi madre estaba mal y ese día me llevó a dormir a casa de una amiga. Si ese día le hubiese dicho que no, quizás todo hubiese sido diferente”, explica la joven, ahora con 23 años.
“Entendí que mi madre tenía una enfermedad, me sentí abandonada. Es muy duro”, añade Vigo, cuya madre, la hermana pequeña de la reina, terminó con su vida cuando la actual monarca era princesa de Asturias. Y revela que enterarse de la causa del fallecimiento de su madre resultó en un shock para ella. “Fue muy doloroso”. Tanto, que llegó a intentar autolesionarse.
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La esposa de Felipe VI fue vista en un supermercado de la cadena cerca de Aravaca, a las afueras de Madrid, haciendo unas compras antes de volar a Mallorca.
Pero su madre fue también su salvación en sus momentos más duros. “A los 14 años empecé a hacer cosas dañinas para mí, como dejar de comer y vomitar. Empecé a los 8 años, al mirarme al espejo me odiaba”. Y ahí se acordó de ella y lo compartió con su familia: “Me estoy matando poco a poco y no quiero que me pase lo que a mi madre”.
Carga contra Jaime Peñafiel
Durante la charla con la publicación del corazón, la joven defiende también a su tía, la monarca, y carga contra el veterano periodista Jaime Peñafiel, quien había escrito: “Dicen mis fuentes que Letizia tenía problemas para quedarse embarazada. Yo sé por otras fuentes que ella iba a Valencia donde se estaba tratando de problemas genéticos. Según mis fuentes, su hermana Érika cedió sus óvulos a Letizia para que pudiera embarazarse. No es malo ni extraño ni criticable”.
Y agregaba: “Al parecer, por eso Érika tenía pasión por las hijas de Letizia, porque eran sus medio hijas. Tanta pasión tenía Erika que Letizia le prohibió ir a Zarzuela y acercarse a esas niñas. Y ese fue el motivo por el que Érika se suicidó. Eso me dicen mis fuentes”.
“Lo pasó muy mal por un hombre que está fuera de lugar”, dice la bailarina acerca del dolor de su tía por las palabras de Peñafiel. “Lo que ha dicho de mi madre me parece una barbaridad y una sobrada”.