Belén Esteban, sobre las secuelas de su grave lesión: “No puedo conducir”

Belén Esteban fue protagonista de uno de los mayores sustos jamás vividos en la historia de Sálvame. La de Paracuellos sufrió una aparatosa caída en plena emisión del programa, cuyo diagnóstico fue una fractura de tibia y peroné, de la que aún se sigue recuperando tras casi un año en el dique seco.

La colaboradora de Mediaset ha compartido con los compañeros de Semana las graves secuelas de esta lesión, que la obliga a precisar rehabilitación diaria. “Me encuentro mucho mejor, ya que todos los días voy a rehabilitación y me está viniendo muy bien”. Sin embargo, Belén cuenta que tiene que volver a pasar por quirófano debido a una nueva dolencia originada en dos dedos de su pie.

“El único problema es que voy a tener que volver a pasar por el quirófano porque me tienen que operar de dos dedos porque de la fractura tan grande que me hice se me ha quedado el tendón cogido en los dedos y los tengo doblados”, recoge la revista.

“No tengo fuerza para acelerar y frenar”

La televisiva, que ha seguido las recomendaciones de los médicos, asegura que esta nueva intervención le permitirá recuperar la movilidad perdida en esta zona y así evitar una artrosis, una de las enfermedades degenerativas articulares más frecuentes que aparecen por este tipo de contratiempos. “No puedo estirarlos y el doctor me ha dicho que tienen que abrirme para cortarme los tendones. Creen que soy una persona joven que si no me hago esto puede tener artrosis”.

Belén también ha compartido las situaciones cotidianas que ha perdido por culpa de esta lesión, donde asegura que no puede conducir a raíz de la poca fuerza que tiene en esa zona para pisar los pedales, ni tampoco llevar zapatos con tacones. “Yo que soy taconera, no puedo ponerme tacón. No puedo conducir porque no tengo aún fuerza para acelerar y frenar”.