La Fiscalía se niega a reabrir la investigación de la muerte de La Veneno

El pasado viernes, 'Equipo de Investigación' reveló nuevos detalles sobre la muerte de La Veneno en su programa especial por su 10º aniversario, provocando que su familia presentase un nuevo recurso a la Fiscalía, quienes este jueves han rechazado abrir de nuevo el caso.

El organismo provincial de Madrid se ha negado a reabrir la causa por el fallecimiento de Cristina Ortiz pese a la presentación de un informe pericial que señalaba que su muerte era de "origen violento y lesivo-homicida".

Ya descartaron que fuese un homicidio

La Fiscalía ha rechazado el caso debido a que el último informe aportado no presenta "ningún indicio nuevo" que no haya sido valorado antes sobre la muerte de La Veneno, y "ya descartaron la existencia de un presunto delito de homicidio".

Pese a la solicitud de la familia Ortiz, el organismo ha remitido la autopsia de la actriz, donde se especifica que "aconteció por un fracaso visceral multiorgánico con septicemia y hemorragia menigo-encefálica", y no existe en su cuerpo ningún signo de lucha o defensa.

Además, las pruebas que se han añadido en el nuevo informe se basan en el análisis de unas fotos "tomadas sin consentimiento en el hospital", y el cadáver tenía unas lesiones "que no son expuestas por el médico forense en su informe de autopsia", las cuales acreditarían que se hubiese tratado de una muerte violenta.

No es la primera vez que se habla de las imágenes obtenidas en el hospital, pues la Audiencia Provincial de Madrid ya alegó que las fotos se habían obtenido "de forma irregular y sin la autorización de los responsables del hospital".

Es más, una auxiliar de enfermería denunció que "los familiares de Ortiz estuvieron sacando varias fotos a los aparatos médicos y a la paciente teniendo que llamar a Seguridad y Policía Nacional para ser expulsadas contraviniendo las normas del hospital donde está prohibido sacar fotos y grabar vídeos".

Las pruebas son "meras conjeturas"

Desde la Fiscalía también han asegurado que las pruebas de que la muerte de Cristina Ortiz fue violenta son "meras conjeturas que carecen de soporte probatorio", y que con ellas no se puede reabrir un procedimiento judicial ni la catalogación de muerte violenta.