Tenso reencuentro de Irina Shayk con Bradley Cooper en Ibiza
La pareja se citó en el aeropuerto de la isla para que su hija Lea de Seine regresara a Los Ángeles con su padre a bordo de su avión privado.
Irina Shayk y Bradley Cooper siguen enfrentándose a las consecuencias de su ruptura y este fin de semana han vivido un tenso reencuentro en Ibiza que ha sido inmortalizado en fotografías por la agencia GTRES. El actor se desplazó hasta la isla en avión privado para recoger a Lea de Seine, la hija que tiene en común con la modelo, que ha disfrutado de unas fantásticas vacaciones junto a su madre montando en barco y disfrutando de las excelentes temperaturas y las claras aguas del mar Mediterráneo.
El lugar de reunión ha sido el aeropuerto, y en todo momento se ha podido ver la frialdad y la poca gracia que les hacía a ambos tener que pasar por este trance. Ninguno de los protagonistas ha hecho ninguna intención por tener una conversación con la que fuera su pareja. De hecho, Irina se ha despedido de su hija en el control de pasaportes antes de embarcar a su avión con destino Milán. Bradley, ya con la pequeña, regresó a su jet privado para volver a Los Ángeles.
Cooper llegó al punto de encuentro a las 8 de la mañana acompañado de su gran amigo Sean Penn y la novia de este, y fue cazado posteriormente subiendo al aparato con Lea cogida en brazos. Irina no se presentó hasta una hora después, y se despidió de la persona más importante de su vida después de unos días de barco, baños y risas junto a ella y varios amigos.
Lea es la gran preocupación de la pareja y quieren que no sufra con la separación de sus padres. Incluso estuvieron un tiempo intentando arreglar su historia de amor por su bien. "Por el bien de Lea, siguen pasando tiempo juntos en familia. Bradley es un gran padre. Siempre ha estado muy involucrado con su hija. Está claro que tienen los mismos objetivos. Quieren que viva una vida normal, que esté rodeada de amigos y se divierta jugando. Los dos son padres maravillosos", explicó una fuente del entorno de la pareja para la revista People.
Irina ha intentado refugiarse en el trabajo y apoyarse en estos meses de dolor emocional en sus dos grandes pilares: su hija y su madre, Olga Shaykhlislamova, con quienes ha pasado largos periodos de tiempo durante los últimos tres meses.