Un jardinero de Málaga pasa tres horas salvando a un defín varado

José Bermúdez, un malagueño de 36 años, ha salvado a un delfín varado en la playa de El Morche, convirtiéndose en el héroe de de Torrox (Málaga), localidad donde trabaja como jardinero municipal.

Bermúdez, soportó durante tres horas las bajas temperaturas del mar para impedir que el cetáceo se saliera del agua y lograr así mantenerlo vivo.

El hombre se encontraba trabajando en la zona del paseo marítimo cuando divisó una pareja de guardias civiles y a unos extranjeros junto a la orilla. José, no se lo pensó dos veces y se dispuso a salvar al animal:

“No me lo pensé y que quité los zapatos. Como pude, lo devolví al mar, pero al poco vi que otra vez se salía hacia la orilla. Así estuvimos casi un kilómetro, porque el levante lo arrastraba hacia la zona de la desembocadura del río Güi”, declaraba para diario Sur.

El jardinero explicaba que durante el rescate había cogido un buen catarro y había extraviado su móvil, pero todo valió la pena: “Ha merecido la pena haberme quedado sin móvil, que se me mojó, el resfriado que he cogido por estar tres horas en el mar, y los dolores que tengo de espalda”, aseguraba el protagonista.

Jesús trataba de devolver el delfín al agua al ver que a pocos metros había más miembros de la familia del animal: “Me esforcé porque volviera a nadar, porque veíamos que había más ejemplares a unos pocos metros, a la altura de las boyas amarillas», decía Bermúdez.

Las imágenes fueron compartidas en YouTube por vecinos de la zona y cuentan ya con miles de visualizaciones.

Se está recuperando

Los biólogos especialistas del Aula del Mar de Málaga no llegaron hasta las 11:30 horas. Ahora el delfín listado hembra, que se calcula tiene unos cuatro años, se recupera en el Centro de Recuperación de Especies Marinas (CREMA).

Antes de llegar, los especialistas explicaron por teléfono a Bermúdez que dejara de intentar devolver al animal al agua «porque iba a cansar más al mamífero, al que le costaba ya respirar».

Juan Jesús Martín, biólogo responsable del Aula del Mar de Málaga y del Museo Alborania, declaraba para el referido diario que el ejemplar hallado tenía parásitos en la cola y una herida en la mandíbula. «Normalmente cuando los delfines llegan a la orilla es porque están enfermos y desorientados. No se debe forzar a meterlos de nuevo en el agua», aclaraba.

Héroe local

Según explica Martín, las costas malagueñas son testigo de multitud de varamientos de tortugas y delfines a lo largo del año. Cuando los animales son tratados por los especialistas de la localidad, y si su estado de salud lo permite, son devueltos al mar.

Los vecinos de Torrox piden ahora un reconocimiento para su jardinero municipal que aclara que no busca ningún tipo de agradecimiento:

«Lo hice porque me gustan los animales. Hace unos años salvé a una tortuga que me encontré por la calle, llevándola a un lago en un parque de Benalmádena, y hace poco también evité que atropellaran a un erizo, quitándolo de la carretera y llevándolo al campo», aseguraba Bermúdez.