Disney rompe con PewDiePie, el youtuber que más dinero gana del mundo
La compañía cancela su contrato con Felix Kjellberg después de que el sueco bromease con una imagen contra los judíos.
Una imagen con dos hombres sosteniendo un cartel que dice "muerte a todos los judíos" ha sido uno de los detonantes que han provocado que Maker Studio -propiedad de Disney- rompa toda relación con PewDiePie, el youtuber más famoso del planeta.
Con 50 millones de seguidores, Felix Kjellberg -su nombre real- es la mayor influencia de Youtube y, por tanto, el mejor pagado. Se calcula que el sueco obtuvo 15 millones de dólares de ingresos en 2016, una cifra que puede verse mermada este año por una polémica de tintes antisemitas y con referencias a Adolf Hitler.
Todo comenzó con una investigación publicada en el diario Wall Street Journal en la que se analizaban las publicaciones de PewDiePie del último medio año. La cabecera concluía que el youtuber sueco había introducido en nueve de sus vídeos bromas antisemitas. A la de la imagen de los dos hombres con el cartel se añadía otra con una persona vestida como Jesucristo diciendo que "Hitler no hizo nada malo".
Relaciones rotas
Pese a que Kjellberg eliminó las vídeos, la información llegó hasta Maker Studio, que decidió rescindir su contrato con el joven de 27 años. "Pese a que Felix ha conseguido a sus seguidores siendo provocativo e irreverente, esta vez ha ido demasiado lejos y estos vídeos son inapropiados", aseguró la filial de Disney.
La todopoderosa productora no ha sido la única en comunicar el fin de su relación con PewDiePie. Hace un año, Google, a través de Youtube, inició Scare PewDiePie, una serie en formato reality que había llegado a su segunda temporada y que tampoco seguirá tras haberse hecho público el escándalo.
La respuesta de PewDiePie
Tras eliminar tres de los vídeos apuntados por Wall Street Journal y anunciarse el fin de su relación con Disney y Google, Kjellberg mostró su opinión a través de su cuenta en Tumblr. El youtuber de Gotemburgo que lleva desde 2010 publicando vídeos de forma habitual, aseguró que no apoya "ningún tipo de actitud de odio".
"Pienso en el contenido que creo como un mero entretenimiento y no en un lugar para hablar de política en serio. La audiencia lo entiende así y por eso viene a mi canal", aseguró el sueco, a la vez reconocía que, aunque no era su intención, entiende que "estas bromas resulten ofensivas".