Madrid se suma a celebrar el solsticio de invierno
La capital festejará esta tradición centenaria que da comienzo oficialmente a la estación invernal
El Ayuntamiento de Madrid ha anunciado oficialmente que a partir de este año 2016 la capital de España celebrará la fiesta del solsticio de invierno. Se trata una tradición centenaria que festeja el día más corto en el hemisferio norte y el más largo en el sur, y que da comienzo a la estación invernal.
Para la primera edición de esta celebración, que recibirá por nombre "Fiesta de la Luz y Farolillos", se organizará un pasacalles con muchos "farolillos y diversos elementos lumínicos que inundarán de luz Madrid Río", como informa el Área de Cultura y Deportes del consistorio.
El eje principal de la fiesta será la luz, por los farolillos que llevarán los asistentes. El punto final a la celebración estará dado por un "espectáculo pirotécnico que representará, a través de los colores y la luz, el paso del otoño al invierno".
Fiesta de la Luz y Farolillos
Pensada para todo tipo de personas, de todas las edades y también familias completas, dará el pistoletazo de salida este miércoles 21 de diciembre a las 19:00 horas, y luego se trasladará por toda la zona del Puente del Rey en un desfile "abierto, que anima a la participación ciudadana", como explica The Huffington Post.
Pese a que su convocatoria ha sido tardía y ha habido poco tiempo para inscribirse, ha resultado un éxito: más de 2.000 personas y 42 asociaciones diferentes se han sumado a fiesta que no excluirá a nadie, "con y sin farolillos".
También llega con polémica
La celebración del solsticio de invierno se remonta a cientos de años atrás, en la época de los egipcios. Más tarde, los incas y los romanos también la siguieron. Sin embargo, ahora se le ha dado un toque religioso y la decisión del Ayuntamiento de Madrid ha causado polémica.
Aunque lo que se celebra es ese inicio del invierno y el día más corto/largo del año, algunos han criticado que se está intentando hacer más laica la Navidad, despojándola de su raíz religiosa. Desde el Ayuntamiento se defienden explicando que "no se trata de borrar la base cristiana, sino de incorporar otros elementos que han ido integrando las culturas".