DESDE 1845

Elecciones EEUU: ¿Por qué votan en martes?

El origen es una obsoleta ley de hace 171 años cuando el país dependía de la agricultura y solo los hombres blancos tenían derecho a votar

Elecciones EEUU: Por qué se celebran en martes. Imágen: Publicdomainpictures.com

En Estados Unidos la población está llamada a votar un martes, en concreto el primer martes laboral del mes noviembre cada cuatro años. Esto se traduce en una abstención de casi un 40% que supone, para los más críticos un sistema ineficaz para la democracia más poderosa del mundo.

La razón: una ley de 1845

El origen de esta costumbre, al igual que sucede con otros extraños usos y leyes de otros países, es la herencia de una obsoleta ley del año 1845. En aquélla época la economía del país dependía de la agricultura y únicamente los hombres blancos tenían derecho a votar.

Hasta ese momento cada estado tenía su propia jornada electoral, pero el congreso dictó entonces una ley con el fin de establecer un día de voto común para toda la nación.

Para lograr esta unidad tuvieron en cuenta las necesidades de la época: descartaron los meses de primavera o verano ya que es cuando más trabajo había en el campo, descartaron los inviernos por la dureza del clima, los miércoles por ser día de mercado y los domingos por ser el día en el que se iba a la Iglesia.

Además, la mayoría de los votantes debían desplazarse desde su residencia hasta las principales ciudades para votar para lo que necesitaban tiempo para desplazarse en carro de caballos, así que los días que quedaban disponibles eran los martes.

Por lo tanto, y mientras no cambie la ley, 171 años después los estadounidenses siguen votando en un día laborable y lectivo y Estados Unidos ocupa el puesto número 138 de 172 naciones en participación electoral.

Si a la abstención, debida en gran parte las obligaciones semanales de los votantes, unimos el hecho de que la mayoría de los ciudadanos desconocen por qué deben acudir a las urnas un martes se entiende por qué existen webs como whytuesday.com donde además de explicar todo esto promueven una iniciativa para trasladar las elecciones al domingo, como sucede en la mayor parte de países desarrollados.

“Si podemos mover el Día de los Presidentes o el de Martin Luther King para conveniencia de los compradores, ¿por qué no podemos mover el día de las elecciones para conveniencia de los votantes?”, preguntan desde la asociación.

Así las cosas, el próximo 8 de noviembre, los estadounidenses tendrán que organizar su día para conseguir llegar a las urnas y todo como consecuencia de una ley de 1845.