Andreeva, tras los pasos de Gauff inspirada por Nadal
La rusa de 16 años gana a su compatriota Potapova en dos sets y se enfrentará el lunes a la estadounidense Keys. Pegula, Vondrousova, Swiatek y Svtilona, a cuartos.
Mirra Andreeva confirma en Wimbledon que es una estrella a seguir en el tenis femenino. Con 16 años cumplidos el pasado mes de abril, la rusa, 102ª del mundo, está ya en los octavos de final del Grand Slam británico después de ganar a su compatriota Anastasia Potapova (22 y 23ª) por 6-2 y 7-5 en 1h35. Sigue así la estela de la estadounidense Coco Gauff, que se clasificó para la cuarta ronda del torneo en 2019 con solo 15 años. Andreeva, además, jugó la previa, así que acumula seis victorias en dos semanas. El lunes, porque su partido de tercera ronda debió jugarse el sábado y fue cancelado por la lluvia, se enfrentará a la americana Madison Keys en la Pista 2 y está deseando llegar a la Central.
Andreeva apuntó maneras de competidora cuando ganó dos partidos en el cuadro principal de Roland Garros después de meterse en el evento francés desde la qualy, y en Londres su tenis se ha hecho notar. Tiene similitudes con Gauff por precocidad y madurez, y porque es muy segura. Minimiza los errores y espera los de sus rivales. “Es extraño, porque no soy perfeccionista fuera de la pista, de hecho soy muy desordenada con mis cosas, pero dentro sí lo soy”.
También acude a Rafa Nadal como fuente de inspiración: “Siempre admiré a Federer y fue mi jugador favorito. Pero después, Nadal ganó Roland Garros 2022 y me impresionó mucho, porque tras una lesión, regresó, ganó el Open de Australia y también en París. Ahora, mentalmente solo trato de copiarlo a veces, de recordar qué haría en esos momentos, qué haría con el marcador”. Sin embargo, cuando tuvo que elegir entre la Rafa Nadal Academy y la Mouratoglou Tennis Academy, se decantó por la segunda, en Cannes, según ella por cercanía y quizá porque en Francia se entrenan algunos tenistas rusos, como Daniil Medvedev. Con esos referentes contrarresta su falta de experiencia, la que le sobra a Jessica Pegula, que se clasificó para los cuartos de final con un rotundo triunfo ante la ucraniana Lesia Tsurenko (6-1 y 6-3 en 1h15).
Pegula y Swiatek, adelante
La cuarta favorita se sacó una espina, porque este era el único major en el que no había llegado, como mínimo, al antepenúltimo escalón. Es compañera de dobles de Gauff con serias opciones de avanzar hasta las rondas finales. En individuales le espera el martes Marketa Vondrousova. La checa remontó para ganar por 2-6, 6-4 y 6-3 en 2h11 a su compatriota Marie Bouzkova.
Horas después, en un partido más largo y complicado de lo esperado para la número uno del mundo, Iga Swiatek se las arregló para evitar la eliminación levantando dos puntos de partido en el segundo set. Al final, venció por 6-7 (4), 7-6 (2) y 6-3, en más de tres horas, a la suiza Belinda Bencic. “No ha sido fácil, no me ha pasado mucho esto y estoy feliz de haberlo superado. En realidad jugué esos golpes sin nada que perder”, afirmó, celebrando que está por primera vez en los cuartos de final de Wimbledon, el único major en el que no los había alcanzado. La victoria le asegura, de momento, el liderato del ranking. Solo lo perdería ya si Aryna Sabalenka es campeona el próximo sábado. Se enfrentará a Elina Svitolina, que superó en un duelo de madres tenistas a Victoria Azarenka en otro encuentro épico, que se decidió en el superdesempate (6-2, 4-6 y 7-6 (9) en 2h46).
La ucraniana nunca había podido vencer a la bielorrusa (1-5 en el cara a cara ahora), volvió a competir el pasado mes de abril después de dar a luz a Skäi Monfils y fue campeona en Estrasburgo en mayo. Ahora está a un paso de repetir su mejor resultado en el torneo, las semifinales de 2019. Por eso, entre otras, se emocionó en la entrevista postpartido. “Tenía ganas de llorar al ver el apoyo de toda la gente”, dijo para agradecer los aplausos del público de la Pista 1. “Espero que Harry (Styles) esté viéndome, porque soy muy fan de él y me gustaría verle”, dijo Elina, que iba a ver un concierto del músico inglés en Viena y se lo perdió por avanzar en Wimbledon. Le ha merecido la pena.