Sabalenka es un valor seguro y Jabeur lo pasa mal

Tras unos años en los que al tenis femenino le costó encontrar un pelotón de jugadoras que acostumbrasen a alcanzar rondas finales con regularidad, el circuito WTA comienza a tener varias protagonistas que, cada vez más, son un valor seguro. Extraña es la ocasión en las que las mejores del planeta desaparecen de los torneos a las primeras de cambio, y las tenistas empiezan a cultivar una rivalidad como las que había en tiempos pretéritos. Aryna Sabalenka, de 25 años y 2ª del ranking mundial, y Ons Jabeur, de 29 y 5ª, son dos de las principales artífices de ello, junto con otras como Iga Swiatek, Elena Rybakina o incluso Coco Gauff. Ayer, bielorrusa y tunecina avanzaron a tercera ronda del US Open, aunque cada una lo logró de una manera muy disinta.

Sabalenka, que aspira en este US Open a convertirse en número uno del mundo por primera vez en su vida, apenas se arrancó a sudar antes de batir a la británica Jodie Burrage, de 24 años y 96ª del ranking, por 6-3 y 6-2 en 1h16. La campeona del pasado Abierto de Australia superó la cifra de 600 golpes ganadores en lo que va de año, más que nadie en la WTA (lleva 624, para ser exactos), y celebró tres años sin caer en las dos primeras rondas de un Grand Slam. La última vez que fue sorprendida antes de tiempo fue en el US Open de 2020, cuando cayó ante su compatriota Victoria Azarenka, que después se plantó en la final, en la segunda fase del evento. Desde entonces, seis semifinales en majors y el citado título en Melbourne. Regularidad absoluta de la de Minsk, que en tercera ronda se medirá con la francesa Clara Burel, 22 y 62ª, que derrotó a la checa Karolina Pliskova, 25ª favorita, en dos mangas.

También empieza a ser habitual ver a Jabeur en la pelea por todo en los Grand Slams, aunque, hasta el momento, la tunecina se ha quedado a las puertas del título en tres ocasiones (Wimbledon y US Open en 2022, y Wimbledon este año). Pero Ons, un ejemplo de garra en la pista, es una experta en la lucha contra la adversidad. Y estos días en Nueva York se está doctorando en ello, pues en su debut se la pudo ver enferma, con una tos pronunciada y problemas para respirar, males que todavía arrastró este jueves. Anoche, Jabeur necesitó tres duros y peleados sets para vencer a la checa Linda Noskova, de 18 años y 41ª mundial, por 7-6(7), 4-6 y 6-3 en 2h12. Ya son 13 triunfos para la tunecina este año en majors, mejor cifra de su carrera. Su siguiente parada será otra checa, Marie Bouzkova, de 25 y 31ª, que se deshizo de una Petra Martic que apenas pudo ganar tres juegos.

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Además, en la jornada de jueves en Nueva York destacó un nuevo triunfo de Elina Svitolina, de 28 años y 26ª del ranking. La ucraniana, que regresó al tenis este mes de marzo después de un parón de un año para ser madre, continúa con un nivel altísimo en Grand Slams: suma 11 victorias en tres grandes, a tan solo cinco del mejor registro de su vida (y eso que se perdió el Abierto de Australia). La última víctima de Svitolina fue la rusa Anastasia Pavlyuchenkova, 32 y 88ª, a la que no saludó en la red tras superarla por 5-7, 6-4 y 6-4 en 2h48 de intensa batalla. Durante un momento del partido, Elina dejó una curiosa anécdota al preguntarle a la jueza en un descanso si le podía decir si ya había arrancado el partido de su marido, Gael Monfils. Svitolina se medirá en tercera ronda con estadounidense Jessica Pegula, 29 y 3ª, que ganó con facilidad a la rumana Patricia Maria Tig, 29 y 700ª, por 6-3 y 6-1 en 1h13.

Y para el resto del tenis estadounidense hubo cara y cruz en el día de ayer. La buena noticia fue el apabullante triunfo de Madison Keys, de 28 años y 17ª del mundo, frente a la belga Yanina Wickmayer, 33 y 67ª, por 6-1 y 6-2 en apenas 56 minutos. Keys, que solo ha cedido nueve juegos en este US Open y que espera a la rusa Liudmila Samsonova en tercera ronda, cada vez recuerda más a la jugadora que alcanzó la final del US Open en 2017, además de otras cuatro semifinales de major. No corrió la misma suerte su compatriota Sofia Kenin, de 24 y 101ª, que sucumbió frente a la rusa Daria Kasatkina, 26 y 13ª, por 2-6, 6-4 y 6-4 en 2h21. Desde aquel fulgurante 2020, en el que ganó en Melbourne y llegó a la final de Roland Garros, Kenin apenas ha alcanzado la tercera ronda de un grande en dos ocasiones. Kasatkina, por su parte, se medirá con a la belga Greet Minnen, verdugo de Vickery en tres parciales.