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Paula Badosa
Elena Gabriela Ruse

TENIS | US OPEN

La importancia de las piernas en el tenis de Badosa

La española, que se enfrenta este viernes a Ruse, reconoce que si no están activas, la mano le va “para nada”. Por eso su entrenador, Pol Toledo, se lo recalca “mucho”.

Nueva York
Paula Badosa saca contra Viktorija Golubic en el US Open.
MATTHEW STOCKMANAFP

Después de ganar a la suiza Viktorija Golubic el lunes en la primera ronda, Paula Badosa reconoció que había hecho pequeños cambios en su estilo para adaptarse al tenis rápido que se practica actualmente en el circuito femenino y volver a ganar partidos, toda vez que su lesión de espalda le permite ahora competir con asiduidad. Y el miércoles, tras superar también a la estadounidense Taylor Townsend, la española, que este viernes (17:00 de España, 11:00 locales) se enfrenta a la rumana Elena Gabriela Ruse en busca de los octavos, reveló una de las claves de su juego, en este caso fundamental para ella durante toda su carrera: las piernas.

Fue a raíz de la pregunta de AS sobre la insistencia de su entrenador, Pol Toledo, en recordarle que las active y las mueva durante los partidos. “Les cames, les cames”, le grita en catalán el técnico, como una especie de mantra, en todos los partidos. Badosa explicó por qué: “Me han dado un talento en la mano, pero si no tengo las piernas activas e intensas, la mano no me va para nada. Soy el tipo de jugadora que tengo que estar muy intensa y creo que ahí sí que mi juego responde muy bien. Y mis golpes salen de las piernas. Si estoy bien apoyada, si salto en el saque y todo eso, la mano me responde. Es como he crecido, desde pequeña, como es mi tenis”.

Paula argumenta que, si está “intensa y bien, no es casualidad que haya más winners (golpes ganadores)”. “Así impacto mejor a la pelota. Es por eso que Pau me lo recalca mucho. Ahora os he dicho mi táctica. Espero que no lo lean las rivales”, bromeó Badosa, que ha trabajado mucho en el gimnasio desde que volvió al circuito y para mejorar incluso esa dedicación recuperó a su antiguo preparador físico, David Antona. Badosa es una jugadora grande, con una constitución física poderosa y tiene margen de mejora, como ha demostrado con el paso de los años.

Regreso del año

La frescura de piernas le está permitiendo defender cada vez mejor y correr hacia delante cuando la desafían con dejadas. “No me creía que podía jugar bien en estas condiciones tan rápidas. Demostrármelo a mí misma es algo de lo que estoy muy orgullosa”, afirma la número 26 del mundo, a quien le gustaría llevarse en 2024 el premio al regreso del año (Comeback of the Year, en inglés). “Lo digo porque quiero demostrar que valgo para esto y quiero jugar todas las semanas contra Sabalenka, Swiatek, Pegula… quiero competir contra las mejores y retarlas”.

La de Begur podría encontrarse con ese tipo de rivales a partir de octavos, si supera antes a Ruse (26 años y 122ª), contra quien jugó y perdió en Dubái 2022. “Tengo muy malos recuerdos de ese partido, la verdad. Jugué bastante mal, era un momento en el que yo estaba muy arriba, con muchas expectativas y no lo gestioné nada bien. También recuerdo que ella jugó muy, muy bien. Espero un partido muy bueno. Ella no tiene nada que perder. Yo, lo contrario. A ver cómo gestionó la presión. Me lo voy a tomar como un reto”, avisa Badosa, que tiene pendiente también el inicio del dobles mixto con su pareja, Stefanos Tsitsipas, y aunque reconoce que mira el cuadro, ve muy lejos aún la posibilidad de enfrentarse en cuartos a la vigente campeona del US Open, Coco Gauff. “Puede ser mi primera vez en la segunda semana. A ver como manejo tantas emociones”.

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